El cruce de divisas que registra un mayor número de operaciones en todo el mundo (excediendo con mucho el volumen de contratación de Wall Street), se encuentra en un nivel clave.
En la sesión de ayer traspasó el soporte estratégico de 1,32, mínimo anterior alcanzado a comienzos de octubre, y nivel referencia relativo a la crisis de deuda europea (muestra última de que los acuerdos de la cumbre de la semana pasada no suponen una mejora a juicio de los mercados).
Además, la figura técnica (Hombro-Cabeza-Hombro) que se viene formando desde el último trimestre del año pasado, se acaba de completar justo en ese punto.
En caso de que no se produzca una recuperación inmediata del nivel de 1,32, las caídas pueden continuar con rapidez, hasta el 1,29 (mínimos de enero).
Por el contrario, la superación de dicho nivel puede traer un rebote de fuerte calado, con el precedente de octubre, dónde el EUR-USD pasó del 1,32 al 1,42 (+7,55) en apenas 20 días.