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Defectos y virtudes que condicionan la operativa: el estrés

Si el motor de un coche se lleva siempre demasiado revolucionado, incluso cuando está al ralentí, todo el mundo sabe que se calienta más de lo normal, que consume combustible inútilmente, y que la vida del motor será más corta de lo que cabría esperar.

Cuando eso ocurre con las personas no hay que modificar ni un ápice las consecuencias de la afirmación anterior.

El cuerpo humano tiene previsto el suministro instantáneo de adrenalina para poner a pleno rendimiento todo el organismo y poder salir airoso de un peligro. De la misma manera, un fuerte acelerón en el coche puede salvarnos de una colisión. El problema se produce cuando esos magníficos recursos son utilizados durante muchas horas al día en vez de hacerlo sólo en los casos excepcionales para los que están diseñados.

Si se quema el motor del coche debido a la prisa por ganar más dinero, puede que llegue a resultar rentable siempre que el dinero ganado cubra la factura del nuevo motor con creces. Cuando se quema la vida para atesorar bienes, prestigio, fama, títulos o cualquier otra fruslería, nunca resulta rentable.

Permitir que el estrés forme parte inherente de nuestra vida cotidiana hasta el punto de considerarlo normal, es igual de absurdo como llevar siempre al hombro un depósito con 20 litros de agua, por si acaso algún día se tiene sed.

Cuando un ser humano se enfrenta a un peligro, su cerebro ordena un fuerte aumento de adrenalina. El problema es que raramente un ser humano se enfrenta a un peligro en el que tiene que luchar por su vida. El 99% de los peligros a los que se enfrenta son riesgos de perder dinero, prestigio, imagen, etc. Esto quiere decir que la adrenalina puesta en circulación sólo ha servido para envenenar su organismo como lo hubiera hecho cualquier otra droga, ya que no ha habido un supremo esfuerzo físico en el que el cuerpo haya empleado dicha adrenalina.

Además, el cuerpo paraliza todas las funciones y dedica todo el esfuerzo a lo que considera vital. Cuando el estrés, las preocupaciones continuas o el asumir grandes riesgos como deporte, mantiene la adrenalina alta durante muchas horas al día, el bloqueo general del organismo causa desastres en la salud difíciles de imaginar.

La adrenalina es una hormona segregada por las glándulas suprarrenales. Hay adictos a ella que buscan inconscientemente el riesgo o el peligro para que su cuerpo les suministre esta droga. Sus efectos secundarios son tan terribles como otras drogas duras, sólo su desconocimiento permite etiquetar de "vida moderna" o "persona muy activa" a esta adicción, como si al suavizar su nombre se pudieran restar sus funestas consecuencias. Incluso hay gente que llega a admirar a los adictos a la adrenalina, cosa que no ocurre con ninguna otra clase de droga.

La ludopatía por ejemplo, es una de las formas más frecuentes de conseguir un suministro de adrenalina. Esta clase de personas inconscientemente buscan perder, pues el cuerpo produce más dosis de adrenalina cuando se pierde que cuando se gana. Querer perder es la única explicación posible para que una persona juegue al bingo o a las tragaperras, pues, por inocente que sea, todo el mundo sabe que en esos juegos nadie puede ganar.

Los siguientes casos abonan el terreno para que el estrés se vaya enquistando en la rutina diaria hasta emponzoñar la actitud ante la vida y convertir a la persona en un robot incapaz de controlar la vorágine destructiva que le encamina irremediablemente al abismo:

1 - Se acepta habitualmente mucho más riesgo del que sería sensato y prudente admitir para esas circunstancias.

2 - Se opera con productos o se usan sistemas operativos de los que no se sabe casi nada.

3 - Se aparenta controlar la situación, mientras internamente se sabe que en cualquier momento puede saltar todo por los aires a causa de motivos que no se conocen ni se controlan.

4 - Se asumen responsabilidades excesivas para hacerse el chulo.

5 - Se proyecta llegar a objetivos casi inalcanzables, o se necesita que el mercado haga cosas poco probables para culminar la estrategia como estaba previsto.

6 - Se fustiga al cuerpo con estimulantes para disfrazar o disimular el abatimiento que produce el exceso de aceleración. Con ello se crea un circulo vicioso, pues cuando pasa el efecto de las drogas el individuo se desliza por un espiral descendente que le va hundiendo en niveles inferiores de los que cada vez le será más difícil emerger.

Lo más terrible del caso es que todo este sufrimiento se podría evitar fácilmente usando la clásica receta del razonamiento lógico con el que los seres humanos vienen equipados de serie, sazonada con media cucharada de planificación, y horneada con la proporción adecuada de riesgo/recompensa.

Cuando uno decide dedicarse a vivir de los mercados, suele cometer el error de pensar que tiene la obligación de ganar dinero todas las semanas, o como mínimo todos los meses. Lógicamente eso es imposible, y lo único que consigue con esa pretensión es aumentar la presión de la caldera.

Hay que diseñar una estrategia que nos garantice que se va a ganar dinero todos los años, sin que para que ello ocurra, haya necesidad de que el mercado haga algo extraño o poco probable.

En el peor de los casos, es mejor posponer un par de años la idea de vivir de los mercados, que afrontar esa tarea con prisas, sin los conocimientos necesarios, con insuficiente experiencia obtenida en mercado real, y con graves carencias en el fluido diseño de estrategias y en el control de las emociones.

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6
  1. Top 100
    #6
    06/05/08 22:47

    Siull, se te escapa un pequeño detalle, en el AIAF venden a los precios que pueden y publican los que les da la gana.

  2. #5
    Anonimo
    06/05/08 19:38

    CUANDO LEI EL LIBRO POR PRIMERA VEZ,CREI HABER ENCONTRADO UN NUEVO AMIGO; CADA VEZ QUE LO VUELVO A LEER, TENGO LA IMPRESION DE ENCONTRARME CON UN VIEJO AMIGO.


    MUCHAS GRACIAS..POR TODO

    ALBERTIS

  3. #4
    Anonimo
    06/05/08 15:24

    Hola Francisco,

    Según comentaste en tu blog y por lo que refleja el Banco de Valencia, el pasado viernes 25 de abril entraron parte de las compras de las PP de Fenosa, al 91%. Sin embargo, mirando la web de la AIAF, no aparece reflejado en el histórico de precios de negociación este cambio, sinó superior.

    No sé, si se me escapa alguna información relevante o bien que quizás haga falta la piedra roseta para descifrar la información que proporciona la AIAF.

    Un saludo.

  4. #3
    Anonimo
    06/05/08 04:02

    Cuanta verdad en todos tus comentarios y con los cuales me siento muy identificado por eso ahora trato de saber todo lo que pueda para enfrentarme al mercado.

    zorro muchas gracias por lo de ib me vendra muy bien lo del simulador.

    francisco ya he visto lo de los cursos, me hubiese gustado mas que hubiera sido presencial...pero bueno...seguro que estan muy bien. tengo la ventaja de haber leido el libro, tan solo una vez...pero bueno. por cierto lo recomiendo. aunque hay cosas a las que aun no llego...y tendre que preguntar.

    saludos

  5. #2
    06/05/08 02:06

    Muy bueno y muy útil. Aunque todavía se me dispara a veces la adrenalina ya la tengo más controlada, nada que ver con los comienzos.

  6. #1
    Anonimo
    05/05/08 19:45

    Muy buen articulo Francisco, como todos los de esta serie de defectos y virtudes.

    Un saludo.