Muchos ni entramos en su posición:
Basta con haber comprobado sus modales, estilos, herramientas, métodos, formas y maneras para darse cuenta de que su credibilidad es nula. A partir de ahí, lo que digan se convierte en humo, por mucha verdad que sea (que, en alguna cosa, opino que han tenido razón).
Que por dinero (el que pudieran devolverme) tenga que aceptar tamañas faltas de respeto de un provedoorcillo de servicios no es lo mío.
Vaya a mirarse esas penosas características antes de pretender que la GENTE, es decir, PERSONAS, le consideren como alguien a tener en cuenta.