Juan tiene una PYME del sector de la automatización. Lleva unos cuántos años que el negocio va bastante bien, trabajo no le falta, y más por la fama entre sus clientes. Tiene a 5 empleados fijos y generalmente entre 3 y 6 eventuales dependiendo de la carga.
Esto de la crisis le está pasando mucha factura. ¿Acaso no hay trabajo para hacer? No, no es ese el caso. ¿Acaso alguien no le ha pagado y le ha dejado un descubierto? Pues por su sector y tipo de obra (mayoritariamente mecanismos de compuertas para regadío y pequeñas presas o depuradoras) tampoco. ¿Cuál es entonces el problema?
Juan es una persona solvente, tiene un par de obras pendientes de cobrar con pagarés para dentro de dos meses de dos empresas grandes, así mismo adeuda una cantidad inferior. El problema es que su banco le ha cortado la línea de crédito.
La semana pasada le ofrecieron una obra de tamaño medio, con la cuál tendría trabajo para él, su plantilla fija y un par de eventuales para los próximos 4 o 5 meses. Además la empresa que se la encarga nunca se ha caracterizado por una mala gestión ni por dejar de pagar (si no obviamente ya hubiese descartado la obra). La cuestión es que como suele hacer con esa empresa, cobraría el trabajo a los 90 días de finalizado el trabajo. Como eso es dentro de 8 meses aproximadamente, Juan va a su banco, ya que durante esos 8 meses él tiene que pagar a sus empleados y comprar el material necesario. Juan necesita un crédito para poder hacer esto. Estupefacto ve como Pedro, el jefe de la sucursal le niega el crédito. Son amigos, Pedro sabe que Juan siempre paga, sabe que la empresa a la que le va a hacer el trabajo es "solvente" (nunca se puede estar seguro del todo) pero tiene órdenes de arriba de que no se puede financiar nada. Juan le muestra a Pedro los 2 pagarés pendientes por una elevada cantidad como aval, pero Pedro tiene órdenes de arriba de no aceptarlos. Inclusive hay uno de un cliente que tiene la cuenta en la misma sucursal y Pedro puede mirar su estado. - No hay forma Juan, en serio, no insistas - le dijo Pedro. Juan y Pedro son amigos y se conocen de hace años trabajando juntos, Juan jamás tuvo problemas ni para obtener la financiación ni para pagar puntualmente llegado el momento.
Juan en la siguiente semana recorre 10 oficinas de distintas entidades bancarias de su población, repitiéndole en todas la misma historia.
Finalmente, Juan decide declinar el contrato de la obra. Imposible, no puede hacer frente con su dinero actual a los costes que le supondría hasta que cobrase por el trabajo realizado.
¿Acaso la empresa de Juan no tiene futuro? ¿Acaso no tiene trabajo? NO, ninguna de estas cosas. La empresa de Juan no tiene futuro porque no puede acceder a financiación para poder trabajar.
Al poco tiempo llega fin de mes, Juan tiene que pagar impuestos, las nóminas, el alquiler de la nave. Este mes ha podido, el mes que viene seguramente ya no y tendrá que despedir a alguno o varios de sus empleados o cerrar la empresa. No puede trabajar, sólo en proyectos muy rápidos y de pequeña escala o mantenimientos y reparaciones. No puede embarcarse en cosas más grandes. En 15 años que lleva trabajando jamás estuvo en una situación parecida. Juan no duerme por las noches, no sabe como decirle a sus trabajadores que está a punto de echar el cierre. A la mayoría los conoce de hace años a ellos y sus familias y su situación. Tanto trabajo, esfuerzo y sacrificios para salir adelante.... Es por ello que no tirará la toalla, hipotecando su vivienda o lo que haga falta para salir del bache. Pero pocas opciones le quedan ya y lo irremediable llegará en un par de meses como mucho.
Juan no saldrá en la tele, tampoco saldrán sus 5 trabajadores fijos cuando pierdan el empleo, tampoco harán ninguna manifestación porque saben que su jefe es un buen hombre y trabajador. No tendrán derecho a indemnizaciones millonarias ni montarán líos y quejas con los sindicatos. Juan tampoco se habrá gastado el dinero en mariscadas ni hoteles de 5 estrellas pues ha sido un currante toda su vida.
Multipliquen esta historia por tres cuartas partes de las PYMES de nuestro país. Calculen que éstas generan más de dos terceras partes del empleo, y verán al drama hacia el que nos encaminamos.
Esto es lo que pasa a día de hoy en España en cualquiera de los sectores. Acojona.
Jaime
PD: Aquí un ejemplo de lo que están haciendo los ayuntamientos. Mañana hablaré de lo que está pasando en la obra pública y los pagos de las administraciones.
Esto de la crisis le está pasando mucha factura. ¿Acaso no hay trabajo para hacer? No, no es ese el caso. ¿Acaso alguien no le ha pagado y le ha dejado un descubierto? Pues por su sector y tipo de obra (mayoritariamente mecanismos de compuertas para regadío y pequeñas presas o depuradoras) tampoco. ¿Cuál es entonces el problema?
Juan es una persona solvente, tiene un par de obras pendientes de cobrar con pagarés para dentro de dos meses de dos empresas grandes, así mismo adeuda una cantidad inferior. El problema es que su banco le ha cortado la línea de crédito.
La semana pasada le ofrecieron una obra de tamaño medio, con la cuál tendría trabajo para él, su plantilla fija y un par de eventuales para los próximos 4 o 5 meses. Además la empresa que se la encarga nunca se ha caracterizado por una mala gestión ni por dejar de pagar (si no obviamente ya hubiese descartado la obra). La cuestión es que como suele hacer con esa empresa, cobraría el trabajo a los 90 días de finalizado el trabajo. Como eso es dentro de 8 meses aproximadamente, Juan va a su banco, ya que durante esos 8 meses él tiene que pagar a sus empleados y comprar el material necesario. Juan necesita un crédito para poder hacer esto. Estupefacto ve como Pedro, el jefe de la sucursal le niega el crédito. Son amigos, Pedro sabe que Juan siempre paga, sabe que la empresa a la que le va a hacer el trabajo es "solvente" (nunca se puede estar seguro del todo) pero tiene órdenes de arriba de que no se puede financiar nada. Juan le muestra a Pedro los 2 pagarés pendientes por una elevada cantidad como aval, pero Pedro tiene órdenes de arriba de no aceptarlos. Inclusive hay uno de un cliente que tiene la cuenta en la misma sucursal y Pedro puede mirar su estado. - No hay forma Juan, en serio, no insistas - le dijo Pedro. Juan y Pedro son amigos y se conocen de hace años trabajando juntos, Juan jamás tuvo problemas ni para obtener la financiación ni para pagar puntualmente llegado el momento.
Juan en la siguiente semana recorre 10 oficinas de distintas entidades bancarias de su población, repitiéndole en todas la misma historia.
Finalmente, Juan decide declinar el contrato de la obra. Imposible, no puede hacer frente con su dinero actual a los costes que le supondría hasta que cobrase por el trabajo realizado.
¿Acaso la empresa de Juan no tiene futuro? ¿Acaso no tiene trabajo? NO, ninguna de estas cosas. La empresa de Juan no tiene futuro porque no puede acceder a financiación para poder trabajar.
Al poco tiempo llega fin de mes, Juan tiene que pagar impuestos, las nóminas, el alquiler de la nave. Este mes ha podido, el mes que viene seguramente ya no y tendrá que despedir a alguno o varios de sus empleados o cerrar la empresa. No puede trabajar, sólo en proyectos muy rápidos y de pequeña escala o mantenimientos y reparaciones. No puede embarcarse en cosas más grandes. En 15 años que lleva trabajando jamás estuvo en una situación parecida. Juan no duerme por las noches, no sabe como decirle a sus trabajadores que está a punto de echar el cierre. A la mayoría los conoce de hace años a ellos y sus familias y su situación. Tanto trabajo, esfuerzo y sacrificios para salir adelante.... Es por ello que no tirará la toalla, hipotecando su vivienda o lo que haga falta para salir del bache. Pero pocas opciones le quedan ya y lo irremediable llegará en un par de meses como mucho.
Juan no saldrá en la tele, tampoco saldrán sus 5 trabajadores fijos cuando pierdan el empleo, tampoco harán ninguna manifestación porque saben que su jefe es un buen hombre y trabajador. No tendrán derecho a indemnizaciones millonarias ni montarán líos y quejas con los sindicatos. Juan tampoco se habrá gastado el dinero en mariscadas ni hoteles de 5 estrellas pues ha sido un currante toda su vida.
Multipliquen esta historia por tres cuartas partes de las PYMES de nuestro país. Calculen que éstas generan más de dos terceras partes del empleo, y verán al drama hacia el que nos encaminamos.
Esto es lo que pasa a día de hoy en España en cualquiera de los sectores. Acojona.
Jaime
PD: Aquí un ejemplo de lo que están haciendo los ayuntamientos. Mañana hablaré de lo que está pasando en la obra pública y los pagos de las administraciones.
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