Desempeña diversos puestos ejecutivos en importantes empresas de la industria farmacéutica española.
En diciembre de 1987, después de adquirir un importante paquete accionarial, alcanza la presidencia del Banco Español de Crédito (Banesto), cargo en el que permanece hasta la intervención de la institución financiera por el Banco de España el 28 de diciembre de 1993.
Hoy viendo la pantalla del televisor, he visto a un ser humano triste, abatido, solitario. Me he animado a escribir este artículo, porque en su momento fue una persona importante dentro del panorama financiero en España y también en su momento, me iluminó con su saber hacer y su éxito aplastante en el mundo de las finanzas. No voy a entrar en valoraciones personales de gestión bancaria, solo me limitaré a exponer la situación del Banesto en aquella época y veremos la situación en la que se encontraba.
Tampoco entrare en política (no me interesa lo mas mínimo), quizás su fallo fue no seguir al poder y claudicar como hacen muchos. Se enfrentó a él y perdió. Perdió todo, miles de millones, poder social….pero lo que perdió realmente fue su libertad yendo a la cárcel y la libertad es el bien más preciado que existe en esta vida.
Dirigir un banco no es tarea fácil, dirigirlo con la oposición de un gobierno, es la bomba.Será difícil que veamos situaciones como las del diciembre de 1993, cuando un gobierno decide intervenir un banco nacional; No creo que veamos al gobierno de los Estados Unidos intervenir a Bear Stearns o Lehman o J.P.Morgan o Citigroup sino que si se puede, ayudaran a estos a sobrevivir en momentos delicados.
La verdad será difícil de saber, a excepción que el Sr. Conde la publique en sus memorias (iré raudo y veloz a comprarlas), le he visto sincero, le he visto humano y le he visto con ganas de olvidarse de todo y de recuperar vida.
La trágica muerte de su mujer ha sido un golpe durísimo para él y para todos los que en sus carnes viven una situación parecida, me quedo con una frase que realmente también la pienso yo y que reza asi: mi mujer estuvo siempre a mi lado, cuando era el afamado y vanagloriado Don Mario Conde ahí estuvo, cuando fui el encarcelado y vilipendiado Mario Conde ahí estuvo. Mi mujer estuvo, está y estará siempre en mi corazón; siempre viajara conmigo, jamás la abandonaré.
Durante mucho tiempo este señor fue la referencia de muchos jóvenes de la época, su talante, su porte, sus maneras y su clase lo hacían atractivo a todo los públicos.
Muchos pensaran que este señor les hizo perder dinero con la bajada fuerte de la cotización de Banesto en esa fecha, resulta que el valor ya venía diciendo alto y claro que era bajista mucho antes.
El valor dibujó un cambio de estructura en los 13.51 euros y se mantuvo bajista hasta los 2.56 de mínimo que realizó con la intervención y el consiguiente pánico.
La bajada de la intervención fue de un 68%, buena bajada, pero es que resulta que en nuestros días lleva un 40% de bajada y lo que le queda.Se le culpó de la bajada a él, no veo culpar a Botín y familia de la bajada de Banesto ahora.
Quien sepa un poco de esto sabrá que Mario Conde perdió muchísimo dinero en ese movimiento que meses antes el sabia que se podría producir, si sabiendo lo que iba a pasar no vendió su participación, entiendo que defendió al banco contra viento y marea.
Otros y no digo nombres vendieron su participación en otro valor que descendió desde los cinco euros al infierno, sabéis a quien me estoy refiriendo, ¿verdad?
Me despido tendiendo mi mano a este señor, cometió errores, seguro, se enriqueció a costa de los demás (no lo sé), lo que si se es que me he alegrado mucho de verlo otra vez, eso sí, muy desmejorado y apenado pero manteniendo la clase y el talante de siempre.
Bienvenido a la libertad de la vida Sr. Conde.
Saludos.