Seguro que cuando eran pequeños alguna vez se metieron en un charco y por lo tanto saben los riesgos que se corren cuando se comete esta acción, lo mínimo que te puede pasar, si llevas unas buenas botas de agua, es que salgas con ellas sucias y desde ahí hasta resbalar y salir con la ropa hecha unos zorros, te puede pasar de todo. Pues parece que hay directivos de empresas que se han metido en el charco de la crisis alegremente, corriendo y sin botas y lo que les pueda pasar va a ser poco ante tamaña irresposabilidad.
Hoy por hoy, y mientras no se demuestre lo contrario, nos encontramos en un periodo deflacionario que parece que no va a ser corto y lo que prima es estas condiciones es ajustar costes, reducir deuda, preservar el capital y mantener un flujo de caja libre suficiente para poder retribuir a los accionistas sin necesidad de endeudarse para ello.
Un ejemplo de empresa que parece que se ha metido en el charco es Acerinox, que comenzó muy fuerte en el primer trimestre, cuando aún se disfrutaba a nivel global de los efectos de los diferentes estímulos fiscales, con un beneficio antes de impuestos de 103 millones, que se redujo a 54 millones en el segundo y a menos de 6 en el tercero y lo más probable es que el cuarto trimestre termine con pérdidas aunque en el conjunto del año, gracias al primer trimestre, seguramente será positivo. La producción en todas sus líneas de negocio han sido menores que en los nueve primeros meses de 2010. Se endeudó para construir una nueva factoría en Malasia y continúa pagando el dividendo. Incomprensiblemente hoy cotiza en positivo y a un precio que no cuadra con las cuentas que presenta. Los inversores deben de ir con cuidado no sea que se metan también en el charco sin botas, ya que lo más seguro es que esta subida se deba al cierre de posiciones cortas.
Otra empresa que también parece que se ha metido en un charco es Iberdrola, que huyendo de su máximo accionista se ha endeudado más de lo razonable y ahora, con la reducción de consumo de energía eléctrica que se está materializando en todas sus zonas de negocio menos Latinoamérica, resulta que no genera el flujo de caja suficiente para retribuir a sus accionistas y lo hace a base de ampliaciones de capital y paga en especie, lo que hace que el beneficio por acción se vaya reduciendo y por lo tanto que cada vez sea menos atractiva para nuevos inversores. Los días pasados ha sibido de una forma aparentemente artificial para ajustar el dividendo a los intereses de la empresa, pero ya parece que lleva el camino de retornar a su valoración anterior.
La lista de empresas en estas condiciones no es corta, así que anden con cuidado no se vayan a meter en un charco sin llevar unas buenas botas de agua.
Saludos.
Nota: Para ver el indice de las empresas publicadas pinche aqui