Luisagc
26/11/12 20:51
Ha comentado en el artículo La peor Justicia del mundo ahora es también la más cara
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Las cortes de mediación (en realidad, de arbitraje, que no es exactamente lo mismo) aceptan un asunto, lo resuelven, lo cobran y, después, aceptan otro; en un juzgado entra todo lo que los abogados quieren. El número de asuntos que acuden al arbitraje es muy reducido, por razones que sería largo explicar, pero que se resumen en su elevado coste para las partes y en que, al final, hay que ir a un juez para ejecutar lo resuelto. La dilación de los procesos judiciales en España es muy variable (según territorios y jurisdicciones) y las causas son múltiples, pero lo decisivo es que esas causas afectan a todas las fases del proceso: lentitud estructural del sistema (medios insuficientes, informática obsoleta, personal poco cualificado, inexistencia de un mando único...); lentitud en la tramitación (excesivo número de asuntos, desorganización del trabajo, productividad insuficiente, leyes que permiten toda clase de incidentes dilatorios por parte de los abogados...); lentitud en la fase resolutoria (escaso número de jueces, pautas de trabajo no estandarizadas, productividad mejorable introduciendo métodos de trabajo más eficientes...); y lentitud en la ejecución, porque la estructura de la justicia está hecha para producir papel y no para actuar sobre la realidad. Como bien dices, hay países donde la Justicia funciona como un reloj (Alemania es el mejor ejemplo en Europa) y podríamos aprender de ellos, pero, sinceramente, creo que los políticos no tienen el menor interés en que sea así y no están dispuestos ni a esfuerzos ni a poner dinero.