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Participaciones del usuario Karlicones

Karlicones 28/08/18 13:39
Ha respondido al tema Versos sueltos
Ay, no era esta la que yo buscabaaaa...                     11       ¿CÓMO NACE UN RECUERDO? Retrato de Dionisio Ridruejo ¿Cómo nace un recuerdo? ¿No era un junio?  El cielo abría su puerta  sobre el valle del Arga. Entre los montes  iba la luz con obediencia trémula.  Recuerdo que el silencio atardecía  toda la vida a su extensión sujeta:  los caminos sin gente, las murallas,  y el fresco olor que a los pinares lleva.  Oyendo unas campanas vi tus ojos,  pequeños y naciendo de la tierra  jugaban con un dejo campesino  en la mirada concentrada y lenta,  no suspicaz pero alertada y pronta,  no impositiva pero fija y cerca  de ser dura, tal vez, cuando nos mira  y nos puede ayudar con su dureza.  Los ojos sin pestañas, se diría  sin párpados también, sin brillo apenas,  con libertad no exenta de mesura,  con derramada y fácil negligencia.  ¿Cómo nace un recuerdo? La luz última  arropaba tu cara entre la niebla,  descarnada, pequeña, fina y dulce,  cansado el gesto y sin cansar la fuerza.  El cabello castaño, cuando ríes  la risa te reclina la cabeza;  la piel áspera y pálida, la boca  desdibujada, exánime, risueña.  En testimonio de vivir tenías  hoyuelada la cara,                                        y había en ella  una gran paz convaleciente:                                                            hoy  sigues dando esa paz que tú no encuentras.  Recuerdo que me hablabas descansando  todo el cuerpo en la voz, y tu voz era  la que llevaba al mundo de la mano,  amplia, segura, convencida, cierta.  Recuerdo... ya no sé. ¿Cuándo empezaste  a estar detrás de la memoria entera,  detrás y como un tren que caminara  sobre dos vidas en la misma rueda? Luis Rosales, 1951       ¡¡Sed muy felices!!      
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Karlicones 28/08/18 13:38
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Atención a cada palabra, qué gran verdad...       CANCIÓN DONDE SE EXPLICA, BIEN EXPLICADO, QUE AL PRONUNCIAR UNA SOLA PALABRA PUEDES HACER TU BIOGRAFÍA A Dámaso Alonso La palabra que decimos  viene de lejos,  y no tiene definición,  tiene argumento. Cuando dices: nunca,  cuando dices: bueno,  estás contando tu historia  sin saberlo. Luis Rosales         ¡¡Sed muy felices!!        
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Karlicones 28/08/18 13:37
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.   LA VIRTUOSA JULIETA RECAMIÉRE DIVISA AL POETA Y yo, que en pequeñas partículas dormitaba en el fondo de mis ojos al momento afloré. Y creo que él me vio. Antes de volver a sedimentarse en lo profundo me vio. Aparecí como un círculo que danza, como franja de vasija, y en cada figura me mostraba diversa. Aparecí como un cortejo de mujeres distintas, y el rostro de cada una era el genuino. Aparecí, y al instante, me desvanecí como un trasgo. Pero creo que él me vio. Y aun así quise regresar, asomarme, contemplarlo con mis innumerables ojos, abrumarlo con las múltiples imágenes, todas verdaderas, con el recitado de mis muchos nombres; consentirle de nuevo sorprenderme, revelarme bajo mi única                                               apacible                                                               e invariable máscara. Sí, eso quise. Ana Rossetti     ¡Guay!     ¡¡Sed muy felices!!          
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Karlicones 28/08/18 13:36
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.   «...QUE PUEDO MORIR UNA MUERTE DE LUJOS» Keats A Ocaña Era esta vez el fuego. Esta vez cresta azul, creciente e inflamada, dilatado ropaje erizado de picas, suave lengua. Todo es pronto arrugado papel. Arrugado papel, cuerpo. Vestido, antes resplandeciente, yesca ahora. Antes fiesta, grito de horror apenas un instante. Y la estallante palma, que en la tela prendió su broche de luciérnagas, ahora, pavo real que plegara su cola, su abanico. Ana Rossetti     Hay gente tan terriblemente obsesionada, que cuando ve que sus indirectas quedan en agua de borrajas, son capaces de inventarse cualquier chorrada, con tal de poder meter la gamba, una y otra vez. Su profesión es molestar, bueno, su oficio, que para ser desagradable, no es necesario ni cultivar tu intelecto, ni educarte en nada.     ¡¡Sed muy felices!!        
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Karlicones 28/08/18 13:34
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No estoy del todo de acuerdo, como no podría ser de otra forma, jajajaa        LO QUE ES CASARSE Formar una pasión de dos pasiones, fundir en un derecho dos derechos, fraguar un lecho noble de dos lechos y atar a una ambición dos ambiciones. Juntar en un soñar dos ilusiones, forjar un techo santo de dos techos, hacer un pecho puro de dos pechos, sumar un solo amor dos corazones. Anudar en un lazo dos divisas, formar un solo trino de dos risas, dos miradas fundir una mirada. Dos llantos enlazar un solo llanto, dos canciones prender un solo canto, ¡esto es casarse y lo demás no es nada! Salvador Rueda       Lo del trino, sí que me ha gustado... Es una gran definición.     ¡¡Sed muy felices!!     Bueno, gran definición y certera, si te va bien en el matrimonio, claro está...    
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Karlicones 28/08/18 13:33
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.    EL CENACHERO Allá van sus pescadores con los oscuros bombachos Columpiando los cenachos con los brazos cimbradores. Del pregón a los clamores hinchan las venas del cuello: Y en cada pescado bello se ve una escama distinta, en cada escama una tinta y en cada tinta un destello. Salvador Rueda     Maté un perro y me llaman mataperros.     ¡¡Sed muy felices!!        
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Karlicones 28/08/18 13:32
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De este no pondremos más, que luego empiezan con las denominaciones de origen y meten la pata hasta el zancarrón...     TODO LO QUE ES MI VIDA ESTÁ EN TU VIDA Tu alegría define mi alegría. Tu ternura construye mi ternura. Elevándose a ti mi poesía, consagrada a tu amor, se transfigura. Tu mirada, perfecta como el día, ¡qué suavidad al corazón procura! Sobre él vuelca siempre la armonía interior que le anima en su dulzura. Cuando te digo mía es porque siento rondar cerca de mi tu pensamiento, imagen de la estrella y de la rosa. Todo lo que es mi vida está en tu vida, como el alba en el lirio sumergida, como el oro en la ardiente mariposa.                 * Ella hasta en la razón y el desatino dueña de mi dolor y mi alegría. En el agua diamante y en el vino uva y fresa maduras bajo el día. Ella en la ausencia, flor de lejanía. En el recuerdo, voz de melodía y en la nostalgia, fuego de esperanza. Ella en la soledad tan sólo mía. Desnudo amor que entre mi sueño avanza como la forma de la Poesía. Manuel Felipe Rugeles       ¡¡Sed muy felices!!        
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Karlicones 28/08/18 13:31
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Jajaja, recordando aquellos gloriosos tiempos de cuando era vaca...      ¡AY, LA VAQUITA DE ORDEÑO! Luz de la mañana y verde mansedumbre en todo el campo. Suelta va la vieja copla sobre los lentos rebaños. ¡Ay, la vaquita de ordeño, tan mansa, tan silenciosa! ¡Cómo lame al becerrito y cómo mueve la cola! Panzuda y con esos ojos claros que el cielo retratan, ¡ay, cómo todas las tardes vuelve del campo a la casa! ¡Ay, la vaquita de ordeño, con las dos orejas blancas y un lucerito en la frente! ¡Parda piel y negras manchas! Manuel Felipe Rugeles   ¡¡Sed muy felices!!        
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Karlicones 28/08/18 13:30
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.   Merece la pena leerlo...      EPÍSTOLA (A Damián Menéndez Rayén y Francisco Giner de los Ríos) No arrojará cobarde el limpio acero mientras oiga el clarín de la pelea, soldado que su honor conserve entero; ni del piloto el ánimo flaquea porque rayos alumbren su camino y el golfo inmenso alborotarse vea. ¡Siempre luchar!... del hombre es el destino; y al que impávido lucha, con fe ardiente, le da la gloria su laurel divino. Por sosiego suspira eternamente; pero ¿dónde se oculta, dónde mana de esta sed inmortal la ansiada fuente?... En el profundo valle, que se afana cuando del ario la estación florida lo viste de verdura y luz temprana; en las cumbres salvajes, donde anida el águila que pone junto al cielo su mansión de huracanes combatida, el límite no encuentra de su anhelo; ni porque esclava suya haga la suerte, tras íntima inquietud y estéril duelo. Aquel sólo el varón dichoso y fuerte será, que viva en paz con su conciencia hasta el sueño apacible de la muerte. ¿Qué sirve el esplendor, qué la opulencia, la oscuridad, ni holgada medianía, si a sufrir el delito nos sentencia? Choza del campesino, humilde y fría, alcázar de los reyes, corpulento, cuya altitud al monte desafía, bien sé yo que, invisible como el viento, huésped que el alma hiela, se ha sentado de vuestro hogar al pie el remordimiento. ¿Qué fue del corso altivo, no domado hasta asomar de España en las fronteras cual cometa del cielo desgajado? El poder que le dieron sus banderas con asombro y terror de las naciones ¿colmó sus esperanzas lisonjeras?... Cayó; y entre los bárbaros peñones de su destierro, en las nocturnas horas le acosaron fatídicas visiones; y diéronle tristeza las auroras, y en el manso murmullo de la brisa voces oyó gemir acusadoras. Más conforme recibe y más sumisa la voluntad de Dios, el alma bella que abrojos siempre lacerada pisa. Francisco, así pasar vimos aquella que te arrulló en sus brazos maternales, y hoy, vestida de luz, los astros huella: que al tocar del sepulcro los umbrales, bañó su dulce faz con dulce rayo la alborada de goces inmortales. Y así, Damián, en el risueño mayo de una vida sin mancha, como arbusto que el aquilón derriba en el Moncayo, pasó también tu hermano, y la del justo severa majestad brilló en su frente, de un alma religiosa templo augusto. Huya de las ciudades el que intente esquivar la batalla de la vida y en el ocio perderla muellemente: que a la virtud el riesgo no intimida; cuando náufragos hay, los ojos cierra y se lanza a la mar embravecida. Avaro miserable es el que encierra la fecunda semilla en el granero, cuando larga escasez llora la tierra. Compadecer la desventura quiero del que, por no mirar la abierta llaga, de su limosna priva al pordiosero. Ebrio, y alegre, y victorioso vaga el vicio por el mundo cortesano: su canto de sirena ¿a quién no embriaga? Los que dones reciben de su mano himnos alzan de júbilo, y de flores rinden tributo en el altar profano. En tanto, de la fiesta a los rumores, criaturas sin fin, herido el seno, responden con el ¡ay! de sus dolores. Mas el hombre de espíritu sereno y de conciencia inquebrantable (roca donde se estrella, sin mancharla, el cieno) la horrible sien del ídolo destoca, y con acento de anatema inflama tal vez un noble ardor la turba loca. Jinete de experiencia y limpia fama, armado va de freno y dura espuela donde una voz en abandono clama; de heroica pasión en alas vuela, y en ella clava el acicate agudo por acudir al mal que le desvela. Si un instante de error cegarle pudo, los engañosos ímpetus reprime, y es su propia razón freno y escudo. Sin tregua combatir por el que gime; defender la justicia y verdad santa, llena la mente de ideal sublime; caminar hacia el bien con firme planta, a la edad consolando que agoniza, apóstol de otra edad que se adelanta, es empresa que al vulgo escandaliza; por loco siempre o necio fue tenido quien lanzas en su pro rompe en la liza. Si a tierna compasión alguien movido vio al generoso hidalgo de Cervantes, ¡cuántos, con risa, viéronle caído! Acomete a quiméricos gigantes, de sus delirios prodigiosa hechura, y es de niños escarnio y de ignorantes. Mas él, dándoles cuerpo, se figura limpiar de monstruos la afligida tierra, y llanto arranca al bueno su locura. Así debe sufrir, en cruda guerra (sin vergonzoso pacto ni sosiego) contra el mal, que a los débiles aterra, el que abrasado en el celeste fuego de inagotable caridad, no atiende sólo de su interés el torpe ruego. Árbol de seco erial, las ramas tiende al que rendido llega de fatiga, y del sol, cariñoso, le defiende. Él sabe que sus frutos no prodiga heredad que se deja sin cultivo; sabe que del sudor brota la espiga, como de agua sonoro raudal vivo, si del trabajo el útil instrumento hiende la roca en que durmió cautivo. ¡Oh del bosque anhelado apartamiento, cuyos olmos son arpas melodiosas cuando sacude su follaje el viento! ¡Oh fresco valle, donde crecen rosas de perfumado cáliz, y azucenas, que liban las abejas codiciosas! ¡Oh soledades de armonías llenas! en vano me brindas ocio y amores, mientras haya un esclavo entre cadenas. Que aún pide con sacrílegos rumores ver libre a Barrabás la muchedumbre y alzados en la Cruz los redentores. Que del sombrío Gólgota en la cumbre, regada con la sangre del Cordero sublime en humildad y mansedumbre, mártires ¡ay! aún suben al madero que ha de ser, convertido en árbol santo, patria y hogar del universo entero. Padecer es vivir; riego es el llanto a quien la flor del alma, con su esencia debe perpetuo y virginal encanto. Amigos, bendecid la Providencia si mandare a la vuestra ese rocío, y nieguen los malvados su clemencia. ¡Qué alegre y qué gentil llega el navío al puerto salvador, cuando aún le azota con fiera saña el huracán bravío! Así el justo halla al fin de su derrota por el mar de la vida proceloso, del claro cielo en la extensión remota puerto seguro y eternal reposo. Ventura Ruiz Aguilera     Muy bueno. Sí, señor.     ¡¡Sed muy felices!!        
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Karlicones 28/08/18 13:29
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. ENXIENPLO DEL ASNO E DEL BLANCHETE Estrofas 1401-1411 Un perrillo blanchete con su señora jugava, con su lengua e boca las manos le besava, ladrando e con la cola mucho la falagava; demostrava en todo grand' amor que la amava. Ant' ella e sos conpañas en pino se tenía, tomavan con él todos solás e alegría, dávale cada uno de quanto él comía. veyalo el asno esto de cada día, El asno de mal seso pensó e tovo mientes; dixo el burro nesçio así entre sus dientes: «Yo a la mi señora e a todas sus gentes más con provecho syrvo, que mil tales blanchetes. »Yo en mi espinazo les trayo mucha leña, tráyoles la farina, que comen, del açeña: pues también terné pino e falagaré la dueña, como aquel blanchete, que yase so su peña».— Salió bien rebusnando de la su establía:. como garanón loco, el nesçio tal venía: rretoçando e fasiendo mucha de caçorría, fuese para el estrado, do la dueña seya. Puso en los sus onbros entramos los sus braços; ella dio grandes boses, vinieron los collaços, diéronle muchos golpes con palos e con maços, fasta qu' en él los palos se fesyeron pedaços. Non deve ser el ome al faser denonado nin desir nin comidir lo que le non es dado: lo que Dios e natura an negado e vedado, de lo faser el cuerdo no deve ser osado. Quando cuyda el nesçio que dize bien derecho, e cuyda fazer serviçio e plaser con su fecho, dize mal e locura e faz' pesar e despecho. callar a las vegadas faze mucho provecho. E porque ayer, señora, tanto vos arrufastes, por lo que yo desía por byen, vos asañastes, por ende non me atrevo a preguntar que pensastes: rruégovos que me digades en lo que acordastes— La dueña dixo: «Vieja, de mañana madrugeste a desirme pastrañas de lo qu' ayer me fableste; yo non te lo consentría, como tú me lo rrogueste: que conssentir no devo tan mal juego como éste».— «¡Sy!», dixo la comadre, «¡quando el surugiano el coraçón querría sacarle con la mano! desirte he su insienplo agora por de mano; después dart' he rrespuesta, qual devo bien de llano». Juan Ruiz, Arcipreste de Hita, 1320     ¡¡Sed muy felices!!        
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