Millonarios en política. MUY RECOMENDADA SU LECTURA.

MILLONARIOS EN POLITICA

Entre los políticos españoles que han ejercido –o ejercen– durante el cuarto de siglo de democracia altos cargos públicos los hay que nacieron ya ricos o adquirieron tal condición por su matrimonio. Otros se hicieron millonarios antes de llegar a la política. Y no falta quien consiguió su fortuna o la acrecentó mientras ocupaba una poltrona en la Administración central o autonómica. O una mezcla de varias situaciones.
Desde luego, no son Michael Bloomberg, el multimillonario republicano que acaba de ganar las elecciones a la alcaldía de Nueva York y al que se le calcula una fortuna de 4.000 millones de dólares (unos 744.000 millones de pesetas). Ni tampoco Arnaldo Alemán, que deja la presidencia de Nicaragua acusado de engordar su cuenta corriente con 250 millones de dólares (más de 46.000 millones de pesetas) durante su mandato. Pero de todo hay un poco en este país.
El caso de José Cuiña es el paradigma de mezcla de negocios y política, con el resultado de amasar una fortuna considerable. El conselleiro de Obras Públicas de la Xunta de Galicia no tuvo ningún recato en que sus empresas familiares, puestas a nombre de su septuagenaria madre, Isolina Crespo, abastecieran de diverso material a construcciones que el Gobierno gallego promovía y financiaba. Se le investigó judicialmente, a petición propia, y el Tribunal Superior de Justicia de Galicia archivó la autodenuncia.
Pero los hechos demuestran que lo que en 1971 era un pequeño negocio de carpintería metálica en su pueblo pontevedrés, Lalín, fue creciendo conforme Cuiña subía escalones en su carrera política. Hoy, sus empresas familiares son líderes en Galicia en carpintería metálica y productos derivados de la madera, y a la familia Crespo Taboada se le calcula un patrimonio “de varios miles de millones de pesetas”, según fuentes empresariales gallegas. Un enriquecimiento que el propio Cuiña ha reconocido, pero negando irregularidades.
Y basta con que las empresas de un ministro o consejero autonómico, o las de su familia, reciban tratos de favor del sector público o privado, o que el alto cargo figure en ellas durante el ejercicio de su función política, para que se cuestione si los empresarios deben acceder a altos cargos en la Administración. El primer caso lo encarna el vicepresidente Económico, Rodrigo Rato, con Muinmo, sociedad de la que es accionista. Y en ambos cayó de pleno el titular de Agricultura, Miguel Arias Cañete. En marzo pasado justificó el haber simultaneado actividades públicas y privadas en que en esa época no quería “dedicarse de lleno a la política”.
Además, dos de las empresas de Arias Cañete, Capa, SA e Invalsur, SA, recibieron, mientras fue eurodiputado, incluso siendo ministro, 251 millones de pesetas de los fondos comunitarios destinados a subvencionar actividades agrarias. En febrero de este año estaba vinculado a 35 sociedades, la mayoría de ellas con intereses de la competencia de su ministerio. Ahora, tras ser exculpado de incompatibilidad, asegura que sólo hay que echar “al que mete la mano en la caja”.
Lluís Prenafeta, cuando era todopoderoso secretario general de la Presidencia de la Generalitat, no metió, que se sepa, la mano en la caja, pero empresas suyas fueron agraciadas con 400 millones en créditos, que no reintegró, concedidos por un organismo del Gobierno catalán. Incluso algunas sociedades de la familia del propio president Jordi Pujol, como Hidroplant, han recibido contratos de la Generalitat, lo que su esposa, Marta Ferrusola, considera normal. Y el ex ministro de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, ha sido acusado en Madrid y en Bruselas de mezclar negocios y política. En 1994, siendo comisario europeo, decía: “Yo aquí pierdo dinero”. Sus empresas, sin él, marchaban viento en popa.
A pesar de estos casos, todos los ex ministros consultados por esta revista abogan claramente porque los empresarios puedan actuar en cargos públicos. El ex presidente del Gobierno Leopoldo Calvo-Sotelo y varias veces mi

La opinión generalizada es que los negocios de los empresarios-políticos se ven perjudicados. “Mi experiencia personal y referida a un patrimonio inmobiliario agrícola ganadero es que influye negativamente”, asevera Alberto Oliart. Lo mismo cree José Luis Álvarez: “Las personas honradas, cuando están en política, pierden dinero, posibilidades y oportunidades. Yo nunca he sido empresario, y mi esposa nunca ha tenido actividades empresariales, ni en mi familia propia ni en mi familia política ha habido empresarios significativos. Pero la época en que estuve en política mi notaría perdió muchos clientes”. Un caso aparte es el de Ínigo Cavero, presidente del Consejo de Estado: “Tengo familiares, afortunadamente, que son buenos gestores y que suplen con ventaja mis ausencias de gestión e intervención”.
“Lo que sí tengo claro es que un empresario que se dedica a la política tiene que tener una neta separación entre su actividad pública y su actividad privada. Y, por tanto, no debe haber ahí ninguna influencia recíproca”, señala Manuel Clavero. Y añade: “Mi actividad profesional era la de abogado y, durante el tiempo que ocupé cargos públicos, dejé por completo esa tarea. La actividad que realizaba mi familia era de explotación agrícola y ganadera, sin ninguna relación con la política, y era llevada por los antecesores a la familia más directa mía”.
Otro ex ministro, Jaime Lamo de Espinosa, confiesa: “Cuando un político es correcto en el manejo de los fondos públicos, hay ciertas cosas que le están vedadas y él debe imponer que los miembros de su familia no utilicen determinados cauces”. Él lo puso en práctica: “Cuando fui ministro, yo no tenía absolutamente ningún bien económico, nada más que mi propio piso. Y salí de la política con lo puesto. Pero mi presencia en la política influyó negativamente en mi padre, que tenía explotaciones agrarias. Yo le prohibí que solicitara cualquier tipo de crédito o ayuda mientras yo fuera ministro. Y no lo hizo”.
Tampoco Calvo-Sotelo tuvo negocios mientras ejerció cargos públicos, ni los tiene ahora. “Yo he sido ahí muy torpe. He trabajado por un sueldo, he alquilado mi formación y saber. No he hecho inversiones. No he sido empresario en ese sentido. Pero sí he administrado dinero de otros en empresas grandes, pero ni yo, ni mi familia, ni la de mi mujer hemos tenido nunca negocios”.
Para que la vida pública de los empresarios metidos en política no se vea salpicada de sospechas y acusaciones de enriquecimiento irregular, tal vez convenga tomar nota de las consideraciones que hace Oliart: “Se debe dar publicidad a las empresas a las que ha estado ligado; a la renuncia o dimisión de todos los cargos que pudiera ocupar en tales empresas, que conste de manera fehaciente e inscrita en los registros públicos correspondientes y, siempre que sea posible, la venta de las acciones que pudiera corresponderles en tales empresas, o bien su puesta en administración en fondos o entidades que garanticen plenamente la ruptura del vínculo del empresario con el negocio mientras permanezca en su cargo político”.
Maciá Alavedra i Moner
Barcelona, 1934. Presidente de Autopistes de Catalunya. Licenciado en Derecho. Casado con Doris Malfeito. Conseller de Gobernación (1982-1986), de Industria y Energía (1986-1988) y de Economía (1989-1997) de la Generalitat de Catalunya. Ha sido diputado y portavoz parlamentario de CiU (1977-1982). Empresario antes de entrar a formar parte del Gobierno catalán, en agosto de 1992 presentó actas notariales para demostrar que había dimitido como consejero de dos de las empresas de las que era accionista, Metrega y Metralec, antes de acceder al Gobierno catalán. Al parecer, se había olvidado de inscribir dichas dimisiones en el Registro Mercantil. Hoy, sus negocios se extienden a actividades como la compra y gestión de valores mobiliarios (Webline Invest), inmobiliarias (Promo Grup Deu), productos farmacéuticos (Kern Pharma) y el asesoramiento técnico (Zanfonia), entre otros.
José Luis

La opinión generalizada es que los negocios de los empresarios-políticos se ven perjudicados. “Mi experiencia personal y referida a un patrimonio inmobiliario agrícola ganadero es que influye negativamente”, asevera Alberto Oliart. Lo mismo cree José Luis Álvarez: “Las personas honradas, cuando están en política, pierden dinero, posibilidades y oportunidades. Yo nunca he sido empresario, y mi esposa nunca ha tenido actividades empresariales, ni en mi familia propia ni en mi familia política ha habido empresarios significativos. Pero la época en que estuve en política mi notaría perdió muchos clientes”. Un caso aparte es el de Ínigo Cavero, presidente del Consejo de Estado: “Tengo familiares, afortunadamente, que son buenos gestores y que suplen con ventaja mis ausencias de gestión e intervención”.
“Lo que sí tengo claro es que un empresario que se dedica a la política tiene que tener una neta separación entre su actividad pública y su actividad privada. Y, por tanto, no debe haber ahí ninguna influencia recíproca”, señala Manuel Clavero. Y añade: “Mi actividad profesional era la de abogado y, durante el tiempo que ocupé cargos públicos, dejé por completo esa tarea. La actividad que realizaba mi familia era de explotación agrícola y ganadera, sin ninguna relación con la política, y era llevada por los antecesores a la familia más directa mía”.
Otro ex ministro, Jaime Lamo de Espinosa, confiesa: “Cuando un político es correcto en el manejo de los fondos públicos, hay ciertas cosas que le están vedadas y él debe imponer que los miembros de su familia no utilicen determinados cauces”. Él lo puso en práctica: “Cuando fui ministro, yo no tenía absolutamente ningún bien económico, nada más que mi propio piso. Y salí de la política con lo puesto. Pero mi presencia en la política influyó negativamente en mi padre, que tenía explotaciones agrarias. Yo le prohibí que solicitara cualquier tipo de crédito o ayuda mientras yo fuera ministro. Y no lo hizo”.
Tampoco Calvo-Sotelo tuvo negocios mientras ejerció cargos públicos, ni los tiene ahora. “Yo he sido ahí muy torpe. He trabajado por un sueldo, he alquilado mi formación y saber. No he hecho inversiones. No he sido empresario en ese sentido. Pero sí he administrado dinero de otros en empresas grandes, pero ni yo, ni mi familia, ni la de mi mujer hemos tenido nunca negocios”.
Para que la vida pública de los empresarios metidos en política no se vea salpicada de sospechas y acusaciones de enriquecimiento irregular, tal vez convenga tomar nota de las consideraciones que hace Oliart: “Se debe dar publicidad a las empresas a las que ha estado ligado; a la renuncia o dimisión de todos los cargos que pudiera ocupar en tales empresas, que conste de manera fehaciente e inscrita en los registros públicos correspondientes y, siempre que sea posible, la venta de las acciones que pudiera corresponderles en tales empresas, o bien su puesta en administración en fondos o entidades que garanticen plenamente la ruptura del vínculo del empresario con el negocio mientras permanezca en su cargo político”.
Maciá Alavedra i Moner
Barcelona, 1934. Presidente de Autopistes de Catalunya. Licenciado en Derecho. Casado con Doris Malfeito. Conseller de Gobernación (1982-1986), de Industria y Energía (1986-1988) y de Economía (1989-1997) de la Generalitat de Catalunya. Ha sido diputado y portavoz parlamentario de CiU (1977-1982). Empresario antes de entrar a formar parte del Gobierno catalán, en agosto de 1992 presentó actas notariales para demostrar que había dimitido como consejero de dos de las empresas de las que era accionista, Metrega y Metralec, antes de acceder al Gobierno catalán. Al parecer, se había olvidado de inscribir dichas dimisiones en el Registro Mercantil. Hoy, sus negocios se extienden a actividades como la compra y gestión de valores mobiliarios (Webline Invest), inmobiliarias (Promo Grup Deu), productos farmacéuticos (Kern Pharma) y el asesoramiento técnico (Zanfonia), entre otros.
José Luis

Manuel Clavero Arévalo
Sevilla, 1926. Abogado y catedrático jubilado de Derecho Administrativo. Rico por parte de su familia política, está casado con Guadalupe Ternero de Pablo-Romero. Ministro adjunto para las Regiones (1977-1979) y de Cultura (1979-1980). Ha sido rector de la Universidad Hispalense. Su bufete sevillano, muy próspero en clientes e ingresos, defendió a los propietarios de fincas contra la reforma agraria de la Junta de Andalucía y a los funcionarios contra la Ley de la Función Pública.
Jaime Lamo de Espinosa y Michels de Champourcin
Madrid, 1941. Marqués de Mirasol y barón de Frignani y Frignestani. Ingeniero agrónomo y catedrático de Economía Agraria. Asesor de empresas. Rico de familia. Casado con Carmen Rocamora García-Iglesias. Ministro de Agricultura (1978-1981) y adjunto al presidente (1981-1982). Presidió el grupo parlamentario de UCD. Es administrador único de Bodegas Cañada Honda, SL (empresa familiar) y presidente de Ancisa Telecom y de Gemini Consulting Iberia.
José Cuiña Crespo
Lalín (Pontevedra), 1950. Consejero de Obras Públicas, Transportes, Urbanismo y Vivienda de la Xunta de Galicia (1990) y miembro del Comité Ejecutivo Nacional del PP. Ha sido concejal y alcalde de Lalín (1973-1987), presidente de la Diputación de Pontevedra (1987-1990) y secretario general del PP en Galicia (1990-1999). De modesto origen campesino, en 1971 inició sus actividades empresariales, junto a sus hermanos Eladio y Ramón y su madre María Isolina Crespo Taboada, testaferro de los negocios de sus hijos. Su ascenso en la política coincide extraordinariamente con la prosperidad de las empresas familiares.

Empresa Creación Actividad Capital(1) Nombre y cargo
Metalúrgica de Deza, SL 1987 Carp. metálica 64,6 Grupo Aurela, SL, admin. solidar.
Punade, SA 1989 Deriv. madera 120,5 Isolina Crespo Taboada, adm. solid.
Grupo Portadeza, SL 1993 Deriv. madera 2 Isolina Crespo Taboada, adm. solid.
Inasus, SL 1993 Carp. metálica 55 Isolina Crespo Taboada, adm. único
Aurela Energías, SL 1997 Energías renov. 87,5 Isolina Crespo Taboada, adm. único
Grupo Aurela, SL 1999 Valores mob. 329,5 Isolina Crespo Taboada, adm. único
Madesa, Almacén de Carpintería, SA 2000 Deriv. madera 6 umade, SA, administ. soliadario
Gallega de Suministros Industriales, SA 2000 Ferretería 14 Isolina Crespo Taboada, adm. solid.
Aurela Inmob. 2001, SL 2001 Inmobiliaria 0,6 Ramón Cuiña Crespo, adm. manco.
(1) Millones de pesetas

José Lladó Fernández-Urrutia
Madrid, 1934. Presidente e importante accionista del grupo Técnicas Reunidas (el año pasado facturó 40.400 millones de pesetas y obtuvo un beneficio neto de 1.655 millones) y consejero y accionista (280.000 títulos) del BBVA. Doctor en Ciencias Químicas. Casado con Pilar Arburúa Aspiunza, hija de Manuel Arburúa, ministro de Comercio con Franco (1951-1957). Subsecretario de Mercado Interior (1974-1976), ministro de Comercio (1976-1977) y de Transportes (1977-1978). Primogénito de los seis vástagos que tuvo Juan Lladó y Sánchez-Blanco, ex presidente del Banco Urquijo. Los hermanos Arburúa Aspiuza, hijos de Manuel Arburúa, heredaron varias fincas y cotos de caza en El Escorial (Madrid), Quijorna (Sevilla), Cáceres (junto al embalse de Cíjara) y Cuenca.
Empresa Creación Actividad Capital(1) Nombre y cargo
Aragonesas, Promoción Obras y Construc., SA 1971 Inmobiliaria 6.638 Pilar Arburúa, prta. y cons. deleg.
José M. Lladó Arburúa, vicepres.
Aralar, Establecimiento
Financiero Crédito, SA 1997 Financiera 850 José Lladó, presidente
Pilar Arburúa, vicepresidente
Tejure, SL 1997 Financiera 659 José Lladó, presidente Marta Lladó Arburúa, cons. deleg.
Agrícola Sevillana, SA 1997 Agroganadera 44,5 Pilar Arburúa, presidenta
Agrupación Aralar , SA 1998 Valores mobil. 2.200 José Lladó, presidente José M. Lladó Arburúa, cons. deleg.
Araltec, SL 1999 Valores mobil. 3.204 José Lladó, prte. y cons. delegado Pilar Arburúa, vicepresidente
(1) Millones de pesetas
Abel Matutes Juan
Ibiza, 1941. Licenciado en Derecho y Económicas. Casado con María Nieves Prats. Ha sido alcalde de Ibiza (1970-1971), senador (1977-1982), diputado (1982-1985), europarlamentario y comisario europeo (1986-1994), ministro de Asuntos Exteriores (1996-2000) y miembro de la Comisión Ejecutiva Nacional del PP. Entre sus negocios: Banco de Ibiza, grupo hotelero Doliga, constructoras e inmobiliarias (Cipaey, Inmobiliaria Abel Matutes, Pituisa de Desarrollo), agencias de viaje (Viajes Atalaya), transportes (navieras Umafisa y Pitra), energía eléctrica (Hidronorte), piscifactorías (Cultivos Piscícolas Marinos). En total, unas 40 empresas que facturan más de 40.000 millones de pesetas. Sus hijos Carmen, María y Abel presiden o administran la mitad de esas sociedades. Pero es Antonio, su hermano mayor, el que lleva el día a día de los negocios.
El más rico de Aznar. En 1977, poco antes de sentarse en su escaño de senador por Alianza Popular, declaró ante notario un patrimonio de 2.500 millones de pesetas, que, una década después, había crecido, según él, hasta los 3.000 millones. En 1993, el valor patrimonial de sus empresas, sin contar el banco que fundó su abuelo, Banca Abel Matutes Torres, se había multiplicado por diez, según estimación de Joan Cerdà y Javier Uli en su libro Abel Matutes: La política y los negocios. Hoy, su fortuna personal supera ampliamente los 40.000 millones, según las fuentes consultadas.
Joaquim Molins i Amat
Barcelona, 1945. Ingeniero industrial y máster en Economía y Dirección de Empresas. Presidente de Centro de Cálculo Sabadell y de Jazztel en Cataluña, y previsible candidato a la Cambra de Comerç de Barcelona. Miembro de la alta burguesía barcelonesa. Conseller de Consumo y Turismo (1986-1988) y de Política Territorial y Obras Públicas (1988-1993) de la Generalitat de Catalunya. Ha sido portavoz parlamentario de CiU (1995-2000), a cuyo Comité Ejecutivo perteneció, concejal y candidato a la alcaldía de Barcelona. La pasada primavera abandonó la política, tras haberse dedicado a ella durante 26 años. Al patriarca de la familia, Casimiro Molins Ribot, presidente de Cementos Molins, consejero e importante accionista del Banco Popular (posee 96.400 acciones), se le calcula una fortuna en torno a los 30.000 millones.
El origen de la fortuna. Cementos Molins, SA: creada en 1928. Familia Molins: 55%. Ventas 2000: 71.000 mill. ptas. Benef. 2000: 10.250 mill ptas. Filiales: Cementos Avellaneda (Argentina), Corporac

Alberto Oliart Saussol
Mérida (Badajoz), 1928. Abogado, consejero del Banco Urquijo y criador de cerdos ibéricos en Extremadura. Casado con Carmen Delgado-Torres Flores. Ministro de Industria y Energía (1977-1978), de Sanidad y Seguridad Social (1980-1981) y de Defensa (1981-1982). Fue director general del Banco Hispano Americano. Gran aficionado a la caza, es un asiduo a las monterías que se dan en el coto de Viñuelas, en Madrid, y en la finca La Garganta, en Almódovar del Campo (Ciudad Real). Su actividad empresarial se centra en Despacho Oliart Romero y Asociados y Explotaciones San Rafael, SL, de la que es administrador único. Esta sociedad, creada en 1979 y con 83 millones de pesetas de capital social, se dedica a la explotación agropecuaria. También es administrador único de Explotación San Rafael Dos, SL, dotada un capital de 28 millones.
Marcelino Oreja Aguirre
Madrid, 1935. Presidente de Fomento de Construcciones y Contratas y consejero de Repsol YPF y Acerinox. Doctor en Derecho y diplomático. Casado con Silvia Arburúa Aspiunza. Ministro de Asuntos Exteriores (1976-1980). Ha sido vicepresidente del PP, diputado, europarlamentario (1989-1990), comisario de la Unión Europea (1994-1999), secretario general del Consejo de Europa (1984-1989) y gobernador general del País Vasco (1980-1982). Posee 4.000 acciones de FCC, 5.436 de Repsol YPF y 1.920 de Acerinox. Rico de familia y por parte de su familia política, su esposa preside la simcav Good Lion Investment.
Lluís Prenafeta Garrusta
Ivars d’Urgell (Lleida), 1939. Secretario general de la Presidencia de la Generalitat y cerebro económico de Pujol (1980-1990). Dimitió del cargo por haber mezclado la política con los negocios (seguros, curtidos y medios de comunicación), lo que provocó una querella de la Fiscalía de Barcelona, que un juzgado archivó. Tipel, que era el primer grupo peletero español y en el que la familia Prenafeta poseía el 30% del capital, y Vilassar Internacional recibieron créditos del Institut Català de Finances, dependiente de la Generalitat, por importe de 400 millones de pesetas, que nunca devolvió. A partir de 1994 y tras dejar las presidencias de Petrocat y Túnel del Cadí, comerció con Rusia por medio de Juspi, SA, creada en 1989 y que cuenta con un capital social de 200 millones. Otra de sus sociedades, Poliafers SA, entre decenas que figuran en el ámbito de los Prenafeta, se dedica a la actividad medioambiental.
Jordi Pujol i Soley
Barcelona, 1930. Presidente de la Generalitat de Catalunya (1980). Doctor en Medicina. Casado con Marta Ferrusola i Lladós. En 1959, con su padre y un grupo de empresarios, fundó Banca Catalana, entidad en la que los Pujol suscribieron más del 11% del capital y que devino en un conglomerado financiero y empresarial que en 1983 fue a parar al Fondo de Garantía de Depósitos y que a punto estuvo de llevar a Pujol ante los tribunales. Pero hasta entonces, la incursión bancaria de los Pujol les reportó multimillonarios beneficios. Con los años, y con su padre al frente del Gobierno catalán, los Pujol Ferrusola han ido creando y participando en una veintena de empresas que realizaron contratos con la Generalitat. Hoy, muchos de los negocios familiares están en manos de testaferros. A Carlos Sumarroca y Carlos Villarrubí se les considera como los hombres de negocios del presidente de la Generalitat.
Empresa Creación Actividad Capital(1) Nombre y cargo
Agrupació Mutu Comerc 1902 Seguros 925 Josep Pujol Ferrusola, consejero
Hidroplant, SA(2) 1989 Flores 30 Marta Ferrusola, consejera
Vintiquatre, SL 1996 Arte 7 Jordi Pujol Ferrusola, administ
Pujart, SL 1997 Inmobiliaria 5 Jordi Pujol Ferrusola, administ.
Projectes Barcelona, SL 1998 Inmobiliaria 35 Jordi Pujol Ferrusola, administ.
Europraxis Consulting
Holding, SL 2000 Consultoría 24 Josep Pujol Ferrusola, consejero
Fisioart, SL 2001 Fisioterapia 0,5 Mireia Pujol Ferrusola, administ.
(1) Millones de pesetas (2) En 2000 mill. y benef. de 10 mill

Rodrigo Rato Figaredo
Madrid, 1949. Ministro de Economía y vicepresidente Económico del Gobierno, diputado (1982) y vicesecretario general del PP (1996). Licenciado en Derecho y máster en Empresariales. Casado con Ángeles Alarcó Canosa. Ha sido portavoz del Grupo Popular en el Congreso (1989-1996) y ministro de Economía y Hacienda (1996-2000). Rico de familia, los hermanos Rato controlan directamente o con testaferros más de un centenar de empresas, con una facturación que supera los 10.000 millones de pesetas. Un préstamo polémico de 525 millones concedido por el HSBC, el banco de Gescartera, a su empresa Muinmo; los contratos de publicidad que esta empresa recibió del Gobierno balear durante 1990-2001 por importe de 30 millones; la compra del 45,3% de Aguas de Fuensanta, otra de sus sociedades, por parte de Banesto en marzo de 1999 y la subvención de 22 millones que la misma empresa recibió el pasado 11 de abril del propio Ministerio de Economía, han encandilado la discusión sobre el tema negocios y política (ver El Siglo, número 481).