Los nueve millones de jubilados podrán trabajar y cobrar además un sueldo, compatible con la pensión. Objetivo de

No hay truco, es una opción plenemente lógica.

Por la vía de que algunos jubilados trabajen, quizás nos ahorramos algunos complementos a mínimos (un chocolate del loro).
Por la via de pedirles que no coticen, sino que solo realicen una aportación complementaria a la solidaridad del sistema, logramos recaudar un poquito (otro chocolate del loro).
Por la vía de a cambio, y mientras mantengan ese trabajo, les rebajamos un poco la pensión que cobran, aunque menos que lo que obtengan por el nuevo salario, aun ahorramos un poco más (quizás incluso lo equivalente a dos chocolates del loro).

O sea, mediante un cambio normativo muy sencillo, y que redundaría en un aumento del bienestar económico de jubilados, y un aumento de su poder adquisitivo, el Estado se ahorra al menos cuatro chocolatinas de loro.

Y es que es lo que tienen las políticas sociales de este pais, que en comparación con las mejores opciones europeas, son del tamaño de chocolatinas de loro, pero es que tenemos muchos loros.
Parecemos un museo del chocolate y parque ornitológico a la vez.

Las claves de esa reforma es que los nuevos empleos no devengarían nuevos derechos a pensión, no se aumentaría la base reguladora. Y por ahora, la mortalidad entre los activos es superior a la de los pasivos. Así que pagamos durante un tiempo menos pensiones, y en el entretanto, se nos morirán algunos jubilados más de los esperables.

También hay algo respecto a la compatibilización, a futuro, de emolumentos por trabajo activo y derecho a pensión. El sistema de clases pasivas (a extinguir) ya lo contempla. El sistema de seguridad social general, no. Y como ahora todos los altos funcionarios han sido pasados al sistema de SS,...

Efectivamente. Unos 230.000 inmigrantes abandonaron nuestro país en el primer trimestre del año.

http://www.rtve.es/noticias/20121126/comando-actualidad-sin-billete-vuelta/577837.shtml

Hay que compensar la pérdida de inmigrantes enviando a trabajadores públicos a la lista del paro e intentando "convencer" a los pensionistas que sigan trabajando... porque no puede ser que el desempleo deje de subir hacia la bonita cifra de 6 millones y haya que ir subiendo sueldos.

Están creando un país para el disfrute de los ricos de los bienes y servicios producidos por una sociedad semiesclava y sumisa que apenas tienen para llegar a fin de mes y que no va a poder solicitar amparo ante la justicia para defenderse.

Realmente, la única salvación parece huir.

Huir... Andando por las calles contemplamos demasiada gente con el semblante triste, con la mirada perdida en el suelo, gentes que padecen los efectos de las decisiones de unos dirigentes que pasan el tiempo en restaurantes de lujo rodeados de personas adineradas que intentan convencerles de las medidas a tomar… y dan ganas de huir a otro país cuyos gobernantes no desprecien y menosprecien tanto a su propio pueblo… pero no todos tienen la edad, la formación, las capacidades y las cargas familiares adecuadas para dar ese salto con alguna posibilidad de estar mejor. Pero aquí, estamos recibiendo golpes, uno detrás de otro, con las manos atadas a la espalda… hasta que el cuerpo aguante. Y entonces nos damos cuenta de que no podemos cambiar nada, de que tampoco podemos huir. De que no podemos hacer nada. Y es en este momento, cuando no hay salida alguna, cuando la sociedad puede estallar de rabia y de cólera. Por ahora sólo se ve pesar y tristeza en los rostros de la gente, pero…

las tristezas no se hicieron para las bestias, sino para los hombres; pero si los hombres las sienten demasiado, se vuelven bestias.

Don Quijote de la Mancha. CAPÍTULO XI. De la estraña aventura que le sucedió al valeroso don Quijote con el carro o carreta de «Las Cortes de la Muerte». Miguel de Cervantes Saavedra. 1615. http://cvc.cervantes.es/literatura/clasicos/quijote/edicion/parte2/cap11/default.htm

Tienes mucha razón en lo que dices. Pese a que en España se iniciara la crisis hace varios años, jamás hasta ahora se habia visto un semblante tan triste en los ciudadanos. Esa tristeza, esa apatía por todo, esa desesperanza, esa falta de ilusión, son las mismas que --como he dicho varias veces en este foro-- veía yo en Portugal hace ahora casi un año.
Esperemos que nuestros dirigentes reflexionen seriamente sobre cómo eliminar de raiz las corruptelas, los latrocinios y los enchufes, porque de otro modo se encontrarán con el mayor estallido social de los últimos cien años. Ellos son los máximos responsables de esta miseria y ellos son también los que deben sacarnos de ella.
Quieren mentalizarnos de que hemos vivido por encima de nuestras posibilidades. Lo han repetido tantas veces que incluso nos han convecido de ello. Pero lo cierto es que quienes han llevado este pais a la ruina no hemos sido precisamente las clases media y baja, sino todo lo contrario, son los que hacen posible que España siga respirando. Saludos

http://www.rtve.es/alacarta/videos/repor/

pese a la alegría con la que muchos se marchan, no es una alegría real, es tan solo la derivada de la esperanza de abandonar la miseria.

p.d. el vídeo da para para pensar, sobre todo el minuto 27.

Pues sí, el frío, la soledad y la tristeza que se siente al partir en un largo y desconsolado viaje para trabajar en un país extraño tras quedarse en paro y no encontrar trabajo aquí... dejando atrás mujer y tres hijos pequeños... es terrible.

Personas con estudios, con buena formación académica, enfermeros, ingenieros, abogados, informáticos... aprendiendo a marcha forzada un nuevo idioma que le permita poder ser seleccionado para irse al extranjero a trabajar de... camarero, recepcionista, mozo de almacén... porque aquí no hay trabajo... es desolador.

Cuantas personas terminan de estudiar con la ilusión de encontrar un trabajo en el que demostrar todo lo que saben y todas sus capacidades, en el que darlo todo.

Cuanto deseo de trabajar y de ser útil a la sociedad, de crear valor, de agradar a compañeros, jefes y clientes.

Y de pronto... cuantas ilusiones rotas en pedazos, cuantos desengaños... esa percepción de que aquí no los quieren, de que no les han dado la oportunidad de demostrar lo que valen.

España, un país con un vasto territorio... medio vacío, con una de las menores densidades de población por kilómetro cuadrado de Europa... en el que una dolorosa parte de sus habitantes se tienen que ir fuera a trabajar porque hay casi 6 millones de parados. ¡Qué mal aprovechado tan extenso territorio!

Y cuanto potencial para mejorar el país tirado por la borda.

Mientras tanto, la mediocre clase política española recortando y empobreciendo cada vez más a la sufrida población y legislando y tomando medidas a favor de los poseedores de los grandes capitales. Posiblemente deberían haber sido ellos los primeros que tendrían que haber aprendido idiomas e irse al extranjero a coger algo de experiencia sobre como defienden a su país los políticos de otras partes del mundo.

No se puede arrancar la esperanza y la ilusión del corazón de tantas personas que quieren trabajar y hacerlo lo mejor posible para sacar a sus familias adelante... y no pueden. No hay derecho.