| Mis finanzas El refranero económico: “Dinero y Bolsa, hasta que no se gastan, no se gozan”
Cabe incluso pensar que quién advertía que “si quieres conocer el valor del dinero, trata de pedirlo prestado”, “el camino hacia la riqueza depende fundamentalmente de dos palabras: trabajo y ahorro” o “es mejor acostarse sin cenar que levantarse con deudas”, conocía de memoria proverbios españoles del siglo de oro como: “Si quieres buena fama, que el sol no te pille en la cama”, “Dinero ahorrado, dos veces ganado”, “el dinero va y viene, pero el tiempo no vuelve”, etc.
Los coletazos de la intervención del Banco de Madrid y el debate moral sobre el sistema financiero que se alarga en la UE alumbran “nuevas” teorías sobre el riesgo que deben asumir los clientes. La doctrina que ha impuesto la canciller Ángela Merkel es tan original como aquel refrán que apuntaba: “Deseando bienes y aguantando males, pasan su vida los mortales”
Han pasado 8 años desde que un 26 de febrero de 2007 estallara el Carry Trade japonés e hicieras aguas el sistema financiero mundial. Desde aquella fecha señalada, ahorradores e inversores no han contado con un solo día de sosiego. La idea de “seguridad” y el concepto de “ahorro garantizado” por el Estado se han esfumado por completo, dejando al descubierto la falsa ilusión de una “Unión Monetaria” que se creó “para bien”, para garantizar el valor de la moneda y la mayor seguridad de los ahorros.
Casi resulta divertido leer a ciertos analistas sus recientes crónicas y críticas sobre las actuaciones del Banco de España, de la CNMV y del gobierno en el Banco de Madrid a consecuencia de la denuncia por blanqueo de dinero en Andorra por el Departamento del Tesoro de EEUU. ¿Cómo podían no saber? se exclaman, sin saber exactamente qué deben criticar.
La respuesta, también está en viejo refranero castellano en el que se educaba al pueblo llano:
“El dinero siempre huele a incienso”.
La teoría que ha surgido tras el colapso financiero en EEUU y Alemania pretende dividir la masa monetaria - abundante - en dinero moral y dinero inmoral. Pero es algo que resulta extraño por la propia naturaleza de un dinero que no huele, no sabe y no se parece a nada. Muchos intuyen que ese esfuerzo por estigmatizar el origen moral del dinero es un intento por determinar el uso y destino que se hace de los ahorros. Parecen decirnos aquello de:
“El dinero y la bolsa, hasta que no se gastan, no se gozan”.
http://www.invertia.com/noticias/refranero-economico-dinero-bolsa-no-gastan-no-gozan-3018618.htm
