Se trata de la misma carta que se recibió al inicio del concurso, reconociendo la deuda presentada ante el juzgado de lo mercantil y admitiendo lo que ya reconocían en el informe concursal, el capital invertido como crédito ordinario y las revalorizaciones pactadas como crédito subordinado.
Esto es otro engaño que estaría bien debatir. Resulta que para la Fiscalía la estafa les permitía a los gestores ofrecer revalorizaciones que la filatelia no produce, dice que la fiilatelia es un engaño porque la operación no se basa en la compra-venta de filatelia sino que es una operación financiera en la que los sellos actuan de tapadera. Lo mismo piensa la Administración Concursal. Pero en vez de reconocer los interes legales vigente, tal y como dice la Ley Concursal, reconocen como ciertas las revalorizaciones pactadas.
Evidentemente el objetivo está claro, más aún teniendo en cuenta que una de las administradoras concursales forma parte del Gobierno a través de la Agencia Tributaria. Si ésto es una estafa, los contratos también lo son. Y si los contratos son fraudulentos, éstos tienen que ser considerados nulos por lo que la preferencia de cobro no sería la misma que tenemos ahora, es decir, los últimos.
Bueno, que me lio. La carta ya te digo que no viene más que a confirmar la deuda que inicialmente le comunicaron a tus padres y en ésta ocasión también ser reconocen las revalorizaciones pactadas. Tienes 10 días para impugnar el escrito si es que no se ajustara a la realidad (poco probable).
Saludos y suerte.