En sus últimas declaraciones por separado, los diferentes miembros de la Reserva Federal siguen sin mostrar una posición unánime sobre si ha llegado ya o no el momento de iniciar el proceso de normalización de sus tipos de interés, con la vista puesta en la próxima reunión de la autoridad monetaria estadounidense de los próximos días 15 y 16 de diciembre. Así, el presidente de la Fed de Chicago, Charles Evans, ha afirmado hoy que sería conveniente esperar hasta bien entrado el 2016, atendiendo al hecho de que la tasa de inflación sigue manteniéndose en niveles excesivamente contenidos. Esta divergencia de opiniones entre los miembros de la Reserva Federal no hace sino alimentar la percepción de incertidumbre por parte de los mercados y, con ella, la volatilidad de las cotizaciones.
Aparte de lo anterior, los mercados bursátiles volvieron a acusar también hoy el lastre del sector petrolero tras conocerse que los inventarios de crudo aumentaron la semana pasada en Estados Unidos en 4.2 millones de barriles, muy por encima de los 1.3 millones esperados.
En este contexto, tanto el DJ STOXX EUROPE 600 como el S&P500 han cedido hoy nuevamente posiciones para bajar a testar las primeras zonas de soporte en el entorno de los 372 y los 2064 puntos, respectivamente. De hecho, en el momento de redactar estas líneas el índice estadounidense pierde ese nivel que viene determinado por la importante media móvil de 200 sesiones. Veremos qué sucede a este respecto de aquí al cierre.
Desde un punto de vista fundamental no hay nada nuevo. No esperamos una nueva caída de cierta relevancia desde estos niveles, aunque la situación actual de los indicadores de “momentum” podría darle aún algo más de recorrido a este movimiento bajista de corto plazo (con una posible proyección inicial hacia los 365 puntos para el DJ STOXX EUROPE 600 y los 2040 puntos para el S&P500).
