Hoy se ha anunciado, por parte del Banco Central Europeo, su plan de expansión monetaria, que consiste en comprar, todos los meses, desde marzo hasta septiembre del año que viene 60.000 millones de deuda de determinada calidad. Total 1.140.000 millones de euros, que es el 12,68% del total de la deuda de los países de la Unión Europea a finales de 2013 y que ahora, un año después, seguro que es superior. Pero en caso de que surjan problemas con la deuda comprada, el BCE solo asumirá el 20% de la deuda comprada y el banco central de cada país el resto.
El objetivo oficial es conseguir que la inflación de la Unión Europea vuelva a ser positiva y cercana, pero inferior, al 2%, o dicho de otra forma, que se reactive el consumo, se incremente la demanda, se cese de cerrar el exceso de oferta instalada, se recupere el empleo y la economía mejore, pero para que eso ocurra, el dinero resguardado en los depósitos y cuentas a la vista tiene que ponerse en circulación y las entidades financieras tienen que dar más préstamos. Difícil y ardua tarea la que se deja en manos de los consumidores.
Pero si uno lo piensa con calma, con el nivel de deuda que tienen los estados y las entidades financieras, con esta medida solo se va a conseguir que el BCE compre deuda soberana a las entidades financieras a un precio menor al que la compraron ellas, para que a su vez ellas puedan (sin incrementar su Balance) comprar nueva deuda emitida por los países, para que estos puedan seguir con su política de mantenimiento de estados imposibles dedicados a financiar privilegios políticos, subvenciones a amiguetes, pagar votos y mantener un estado de bienestar por encima de nuestras posibilidades.
Puestos así, lo único que cabe esperar de esta medida es que las entidades financieras ganen dinero a costa de todos, que los países de la Unión Europea consigan liquidez para financiar sus respectivos déficit, poder refinanciar la deuda que vence y crear una nueva burbuja el los mercados de renta fija y renta variable. Hasta que se descubra que el rey esta desnudo,y que en realidad esto es como la pescadilla que se muerde a cola, ya que va a ser el propio Banco Central de cada país el que compre su deuda.
Sean prudentes, porque con medidas como la actual lo único que se consigue es estados más endeudados y con mayor riesgo país, y por lo tanto países a los que un mercado no manipulado debe exigir mayor rentabilidad para prestarle dinero.
Saludos.
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