Estos cálculos los hice en enero con el S&P500 y con el padrón de 2019 de los 8000 municipios españoles. En el caso de los municipios sí que sigue la ley de Benford a la perfección, pero en el S&P500 había anomalías, básicamente porque la base de datos tenía un menor número de datos, con lo que aumentan las fluctuaciones del azar. Además, la base de datos, obtenida de Investing, contaba con 504, ya que había algunas acciones repetidas, como Google y otras. El cálculo fue hecho al cierre del 14 de enero de 2020. Un posible sesgo podría ser debido al “split”, o desdoblamiento del valor de las acciones cuando se alcanzan cotizaciones del orden de cientos. Por ejemplo, si una acción alcanza una cotización elevada, de 200, 300 o incluso más, es frecuente que el consejo de administración de esa empresa decida dividir el precio de la acción por un factor de 2, 5, 10, etc. Obviamente, se han de emitir un número de acciones adicionales para que la capitalización no cambie, correspondientes al factor empleado, multiplicándose el número inicial de acciones por 2, 5, 10, etc. De esa manera, los valores con el primer dígito igual a 1 estarían sobrerrepresentados (12% de desviación). La desviación del dígito 9 (34%) podría ser explicada de la misma manera, si hubiera la costumbre de que muchas empresas hagan el “split” cuando alcancen la centena, creando un sesgo de acumulación de las cotizaciones sobre noventa y pico.