La Guía declaración anual consiste en el itinerario a seguir a la hora de presentar nuestra declaración Anual. Nos explica todos los pasos que tenemos que seguir hasta tener presentada nuestra declaración anual, e incluso nos ayuda a solucionar posibles dificultades que podamos encontrarnos una vez presentada: devolución de impuestos, declaración complementaria, expiración de plazos...
Entonces...¿qué elementos debo tener en cuenta para realizar mi declaración anual?
No todos están obligados al pago de este impuesto. Sólo determinadas personas que cumplen ciertos requisitos en relación a su empleo y patrimonio. En general, estarán obligadas todas las personas que hayan percibido ingresos por, entre otros, los siguientes conceptos: servicios profesionales, rentar algún bien inmueble, actividades empresariales, enajenación o adquisición de bienes, salarios con unas determinadas características específicas, intereses en sólo determinados casos u otro tipo de ingresos.
Es importante saber si estás o no obligado a presentar la declaración anual, ya que trae consigo el cumplimiento de una serie de obligaciones, que de no cumplirlas, nos pueden llevar a incluso a la imposición de multas.
Cuando llega el momento de la declaración anual son muchas las preguntas que nos hacemos: ¿debo presentarla? ¿cuándo? ¿cómo? Es muy importante saber en qué periodo debo presentar mi declaración anual, así como saber qué plazos tengo como límite para presentarla. Esto no sólo a efectos de evitar posibles sanciones posteriores, sino también a efectos de beneficiarnos de presentarla de forma voluntaria y temprana.
Además, también es fundamental saber cómo debo realizarla. Con ello nos evitamos cometer errores y tener luego que realizar una declaración complementaria, o atender a requerimientos de la administración, o tener que realizar gestiones farragosas.
Cuando realizamos nuestra declaración anual, el monto que tributa incluye los ingresos que percibimos en las condiciones que hemos visto, disminuidos en los gastos que podemos deducir. Por tanto es esencial saber cuáles son los gastos que nos podemos deducir, porque en ocasiones puede llegar a reducirnos mucho el monto a pagar.
Entre otros gastos encontramos: los gastos médicos, funerarios, donativos no onerosos, intereses, aportaciones complementarias de retiro...etc. Encontramos más y su explicación en el post dedicado a estos gastos que se pueden deducir a la hora de hacer la declaración anual.
Como hemos visto, si te encuentras dentro de las personas físicas obligadas a presentar la declaración anual, surgen hacia ti una serie de obligaciones. Pero... ¿qué pasa si no las cumples? Cuando estás obligado a presentar la declaración anual y no lo haces, llega un momento en el que tras varios requerimientos por parte de la administración te pueden llegar a sancionar, e incluso someterte al pago de multas.
Por eso es importante saber si estamos obligados y saber cuándo y cómo debemos realizar nuestra declaración.
Por último, y tras presentar nuestra declaración, pueden pasar varias cosas. Puede ser que la declaración nos salga a pagar, o también puede ser que nos salga una cantidad a devolver. En este último caso, que nos es favorable a nosotros, es importante saber cómo solicitarla y cuánto tardan en realizarla. En el post dedicado a ello, se explica muy bien cuánto tarda la administración en devolver los montos, y por qué podría tardar más de lo previsto.
Estos son algunos de los puntos básicos de la declaración anual. No obstante, faltan algunos otros, así como más información y detalle sobre cada uno de ellos. Si aún te quedan dudas, puedes descargarte la guía completa de la declaración anual. Ahí encontrarás todos los pasos y detalle a la hora de realizar tu declaración anual.