El separatismo utiliza senegaleses y bereberes para defender el catalán en el Parlament
El carrusel multiétnico y plurilingüístico contó también con la participación de un gallego, un marroquí y un representante de los bereberes del norte de África, hablante de la lengua amazigh, quien aseguró que “hablando en catalán se abre una puerta que nos convierte en uno más de la casa”
Un ciudadano senegalés afirmó el pasado lunes en el Parlamento de Cataluña que “el catalán es la lengua propia de los catalanes y de los recién llegados” en un acto organizado por la separatista Plataforma per la Llengua –en la órbita de Omnium Cultural y la Assemblea Nacional Catalana (ANC)– en colaboración con la Cámara autonómica durante la celebración del Día Internacional de la Lengua Materna.
“Somos catalanes y el catalán es nuestra lengua”, corroboró en su intervención este senegalés que participó junto a otros extranjeros en este acto de exaltación del catalán y de ninguneo del castellano, que el propio Parlament –de acuerdo con Plataforma per la Llengua– diluye entre los 270 idiomas extranjeros que se hablan en Cataluña, colocándolo en pie de igualdad con el quechua, el urdu y el árabe.
El castellano sólo fue utilizado en una intervención durante pocos segundos en este acto celebrado en el Parlamento catalán. Lo empleó un inmigrante mejicano para criticar que, a diferencia de lo que ocurre en Méjico (como si los mejicanos tuvieran un exquisito tacto con sus lenguas indígenas, apenas habladas), “el Estado español, pese a ser un Estado plurinominal y plurilingüístico, parece que no ha tenido nunca un interés real en otras lenguas, salvo el español” (gracias a ese interés este mejicano pudo ser entendido).
El carrusel multiétnico y plurilingüístico contó también con la participación de un gallego, un marroquí y un representante de los bereberes del norte de África, hablante de la lengua amazigh, quien aseguró que “hablando en catalán se abre una puerta que nos convierte en uno más de la casa (. . .) Este hecho no pasa en ningún sitio, ni de España, ni de Europa, sólo pasa en Cataluña”.
La radical Plataforma per la Llengua, convocante de este acto en el Parlamento de Cataluña -presidido por Núria de Gispert-, ha hecho gala repetidamente de un talibanismo lingüístico promoviendo campañas de hostigamiento contra empresas como Ikea, Granini y Coca-Cola para que rotulen y etiqueten en catalán.
También dedica especial atención a la población inmigrante de Cataluña, a la que utiliza para ofrecer una imagen integradora a través de la lengua, cuando lo que realmente propugna es un totalitarismo lingüístico y la expulsión del español de Cataluña o su reducción a mera lengua familiar.