La diputada socialista Rodríguez Piñero acumula cinco pisos... y cobra dietas
Inmaculada Rodríguez Piñero, secretaria de Economía y Empleo en la Ejecutiva del PSOE y diputada en el Congreso por Valencia, acumula un patrimonio inmobiliario nada despreciable. La dirigente socialista, que goza de la absoluta confianza del secretario general del partido, Alfredo Pérez Rubalcaba, posee una vivienda en Madrid, dos en Moncada, una en Rubielos y otra más en Rocafort.
"Vivo en Valencia y trabajo en Madrid. Decidí comprar en vez de alquilar porque era y es más barato. No tengo nada que ocultar", se defiende la diputada.
Rodríguez Piñero es uno de los 63 diputados contra los que la asociación Democracia Real Ya ha presentado una querella ante el Tribunal Supremo por malversacióny apropiación indebida. La organización, una de las protagonistas de las movilizaciones ciudadanas del 15-M de 2011, acusa a todos ellos de cobrar dietas de alojamiento y manutención pese a disponer de vivienda propia en Madrid, como ya denunció El Confidencial.
Entre los querellados también figura el jefe del Gobierno, Mariano Rajoy -diputado por Madrid-, la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, y varios ministros. En total, 41 diputados populares, 20 socialistas, uno de CiU y uno de Coalición Canaria.
Para tratar de defenderse del aluvión de críticas recibidas en las redes sociales por seguir percibiendo esas dietas, la diputada por Valencia publicó este fin de semana un mensaje en Twitter en el que manifestaba su querencia por la compra frente al alquiler, como si el hecho de ser propietaria de cinco viviendas, y no inquilina, atenuase su pecado. O su delito.
Para más inri, fuentes del Grupo Socialista consultadas por El Confidencial comparten la postura de Rodríguez Piñero. "Interesa pagar la letra de un piso y luego venderlo, sobre todo en estos momentos en que no hay especulación. Para estar cuatro años pagando alquiler, resulta mejor comprar", apuntan esas fuentes.
El Congreso modificó recientemente a escondidas su página web oficial para borrar el rastro de los controvertidos "gastos de alojamiento y manutención" de los diputados, que cobran mensualmente 1.800 euros por ese concepto -salvo los que fueron elegidos por la circunscripción de Madrid, que perciben 870 euros- incluso si disponen de una o más viviendas propias en la capital.
Fuentes parlamentarias consultadas por este diario ya admitieron en su día que el profundo malestar ciudadano provocado por ese privilegio había forzado el cambio en la web. Pero éste se ha limitado a maquillar el nombre de esas ayudas, no a suprimirlas o reducirlas. Esa maniobra de ocultación no ha servido, sin embargo, para que Rodríguez Piñero ni sus 62 compañeros de escaño se hayan librado de la querella.