Los hospitales públicos cobrarán entrada por visitar a los enfermos. Acariciar a un familiar costará cuatro euros
Los hospitales públicos cobrarán entrada por visitar a los enfermos.
Acariciar a un familiar costará cuatro euros
El copago en Sanidad está empezando a afectar también a las relaciones sociales entre pacientes y familiares. La ministra Ana Mato ha confirmado que comenzará esta misma semana a instalar taquillas blindadas en la puerta de todos los hospitales públicos, con el fin de cobrar entrada a aquellos ciudadanos que deseen visitar a sus familiares ingresados.
La entrada general, válida para todo el día, costará tres euros por persona y sólo dará derecho a la estricta observación del familiar hospitalizado, que podrá hacerse desde ocho puntos de vista diferentes, excepto desde el techo. Al parecer, si se pretende acariciar o proporcionar palabras de consuelo y cariño al paciente, se deberán adquirir tickets independientes para cada una de esas acciones. Según ha sabido esta redacción, el ticket más caro ascenderá a cinco euros, y permitirá comunicarle al paciente una batería de dieciocho frases redactadas por el hospital y que el familiar podrá pronunciar cuantas veces considere necesario. “Que bien que estás aquí, bandolero”, “Eso del cerebro no es nada” o “Que asquerosa es la comida de hospital” son algunas de las fórmulas de cortesía que se le podrán dirigir al paciente, si bien la ministra ha querido advertir que repetirle quinientas veces a un enfermo la frase ¿Te encuentras mejor? podría hacer que llegara a convulsionar.
Cuatro euros costará el ticket que autorizará a que un familiar pueda administrar caricias al paciente, nunca a contrapelo, que podrán ir acompañadas de frases de afecto y ánimo siempre que se haya adquirido el ticket correspondiente. Cada enfermo podrá recibir el número de familiares que desee, con la condición de que cada uno de ellos tenga su entrada general y no excedan de 85 personas por habitación.
La ministra de Sanidad ya ha anunciado que se ofrecerán ofertas muy ventajosas combinando los diferentes tickets con la entrada general al hospital, e incluso se pondrá a la venta un bono especial que dará derecho a consolar y acariciar a otros pacientes aunque no tengan relación con el visitante. “Así pues”, informa la ministra, “con el Bono Multipass de 35 euros, un familiar podrá incordiar a todos los enfermos que desee, tendrá derecho a sentarse en el sillón del acompañante con medio culo fuera, comerse la guarnición de verduras de la cena del paciente, y una bebida pequeña gratis. La Asociación Nacional de Personas Ingresadas denunciará el nuevo copago, y ha amenazado con acciones salvajes de protesta, como cambiarse de cama con otros pacientes o comunicarle al médico los síntomas en alguna lengua muerta.
Los hospitales públicos cobrarán entrada por visitar a los enfermos.
