Bueeeeeno, bueeeeeno, la vida es muy sencilla, sí, como tú la quieras ver, pero quizá no tanto como parece a primera vista.
Si a mi padre le hubieran colocado unas preferentes que hubieran seguido pagando el cupón -una cifra millonaria, como fue, de hecho, la menda no se habría quejado, PORQUE NI él mismo SE HABRÍA ENTERADO de la estafa.
Pero cuando un padre te llama a tu casa, a 2500 kilómetros de distancia, diciéndote que no puede pagar la cuota de la Comunidad de vecinos de la casa dónde vive y que el banco le amenaza con embargar si no paga las módicas comisiones de 1695 euritos de nada, porque no tiene entrada alguna, salvo su pensión, que se va en alimentación, ropa y una persona que tiene que trabajar en su casa, amigo, entonces la cosa cambia.
¡¡Vaya que sí te enteras!!
Digo, reiterando mi postura por enésima vez, que RECOMENDAR invertir LA PRÁCTICA TOTALIDAD DE TUS AHORROS A UN SOLO PRODUCTO, ES UNA PÉSIMA RECOMENDACIÓN, una pésima práctica bancaria y ética profesional ya existía ANTES del MIFID. Vaya o no vaya bien la inversión, sigue siendo una NEGLIGENCIA -como mínimo-, como la copa de un pino.
Y las negligencias, en otras actividades profesionales, como las sanitarias, por ejemplo, se pagan. (Cito las sanitarias porque soy boticaria). Si te cortan una pierna por error, nadie se plantea que la culpa sea del paciente (cliente), por haberse dejado recomendar la operación por ese médico... ¿A que no? Sin embargo, las presuntas negligencias bancarias, se han estado yendo de rositas, una tras otra. Así, ¡sí que es la vida!
Que decirle a tu cliente que tiene la posibilidad de sacarlo todo, cuando quiera, con total disponibilidad, como una i.p.f. de toda la vida, pero como es para clientes preferentes, por eso le da más y la presunta ventana de rescate se trata de un CALL, que solo el emisor tiene posibilidad de ejecutar y NUNCA el inversor es MENTIR.
(Perdón por las mayúsculas que no procedan, salvo para enfatizar lo que quiero expresar con contundencia).
Como puedes coges un avión, vienes a España, e intentas desfacer el entuerto, pensando estúpida y erróneamente en la estúpida posibilidad de que tu padre se haya vuelto loco y haya querido jugarse todos sus ahorros a una carta. Y luego, te hablan de un tal foro, llamado Rankia, entras y te enteras de que tu padre solo es uno más de cientos de miles de casos similares o iguales. Vaya, entonces empieza a heder el tema, porque empiezas a plantearte cómo así que de pronto a miles de ahorradores viejitos, les ha dado en la misma época, por invertir en preferentes, oye, que se les ha ocurrido a todos a la vez. ¡Mandaaaaaaaaaaa ...!
Y vas al banco y te cuenta el sinvergüenza de turno que tu padre le pidió preferentes SOS Cuétara y entonces, te das cuenta de todo, del vil engaño, porque de sobra sabes que tu padre no tiene ni pajolera idea de lo que es una preferente, así que es imposible que se la solicitara. Mi padre tenía ipfs y fondos de inversión garantizados. ¡Toma perfil loco!
Suma y sigue. Te pones a investigar el asunto, porque ya ves la estafa claramente y descubres, pidiendo información al supuesto defensor del cliente, permítame que me ría ante esta figura simbólica, que aparece un anexo en el que existe un garabato que se parece a la firma de tu padre como un huevo a una castaña, anexo que, supuestamente ha leído tu viejo progenitor en el que se le explica que ES UN PRODUCTO DE ALTO RIESGO, QUE PUEDE PERDER LA TOTALIDAD DE LA INVERSIÓN.
No puedo hablar de los cientos de miles de ancianos que hay en España estafados, pero te juro que si mi padre en su sano juicio hubiera leído y entendido que lo podría perder todo, NO FIRMA. ¿Sabes los kilómetros que ha tenido que rodar para ahorrar su dinero, los sacrificios que ha tenido que hacer para conservar lo heredado de su padre?
¿Cómo le llamamos ahora? ¿¿Viejo avaricioso, listillo?? No, compañero, no. Cuando se produce una estafa, por mucho que la haya realizado una torre gemela, hay que tener la moral y los coxones de atreverse a condenar el vil acto.
¿Que me hubiera venido mejor que la inversión hubiera ido bien? ¡Nos han "fastidiao"! ¡Pues claro! Pero seguiría pensando que el riesgo fue brutal y que mi padre, de enterarse, no firma, a pesar de la futurible ganancia.
Como accionista del Staf he ganado dinero, no te lo voy a negar. Cuando invertí en 2009 y lo dije, me llamaron LOCA. No me fue mal del todo, dupliqué. ¿Soy una triunfadora? Pues desde el punto de vista de mi abuelo, que era lo que hoy denomináis trader, no, porque me metí sin conocimiento, la suerte del principiante; desde el punto de vista de mi padre, si se llega a enterar me arrea un bofetón, porque su perfil y el mío son distintos.
A un perfil conservador, no se le puede recomendar un producto amarillo ni rojo.
También te digo, que lo invertido, de haberlo perdido, NO me habría dejado con lo puesto, como hicieron con mi padre, que en Paz descanse...
Como ves, la vida parece muy sencilla, pero se te cruza un HdP por el camino y te ha hace complicadísima.
Un saludo cordial
¡Sed muy felices!