Durante los últimos diez años hemos sido testigos de un cambio en la forma en que la gente corriente (es decir, gente como usted y como yo) gestiona sus finanzas personales, hace planes para el futuro e invierte sus ahorros. Internet ha abierto el mundo de los mercados de valores, que hasta entonces había permanecido cerrado, y ha destapado un aluvión de información financiera.
También ha reducido de forma drástica el tiempo empleado en abrir operaciones o traspasar fondos en todo el mundo. Nunca antes había sido tan sencillo abrir una cuenta de inversión online y comenzar a invertir de forma privada en los mercados de valores y financieros de todo el mundo. En tan solo unos segundos es posible registrarse en una agencia de corretaje especializada en forex. Además, depositar fondos y verificar su nueva cuenta de inversión solo le llevará unos cuantos minutos.
Cualquiera que se tome en serio la inversión online puede abrir las primeras inversiones un día o dos después de tomar la decisión de buscar una agencia de corretaje. Esta libertad de movimiento ha creado oportunidades fantásticas para los inversores privados, pero también ha provocado que muchas personas hayan perdido sus inversiones y hayan salido decepcionadas. En este artículo analizaremos los posibles peligros de la inversión online e identificaremos formas de reducirlos mediante una gestión eficaz del riesgo.
Riesgos y beneficios de invertir online
Toda actividad humana implica cierto riesgo, y cada decisión que tomamos en la vida nos expone a posibles peligros. Cuando usted invierte dinero en un activo, los riesgos son más directos. O, al menos, eso parece a simple vista. Si su inversión tiene éxito, usted obtendrá una ganancia; si falla, incurrirá en una pérdida. El problema surge cuando los inversores no comprenden los diferentes factores que pueden afectar el desempeño de un activo o se les proporciona información imprecisa o confusa. Algunas agencias de corretaje sin escrúpulos presentan expectativas nada realistas a los nuevos inversores, quienes se apresuran a invertir y pierden todo el dinero que tanto les costó ganar.
Y es que, en realidad, los mercados financieros pueden ser altamente impredecibles. Incluso los inversores y gestores de fondos profesionales son incapaces de batir al mercado. Puede darse el caso de que después de haber aplicado estrategias de inversión efectivas y haber tomado decisiones lógicas, de pronto un evento global le pille por sorpresa y el precio de sus activos entre en una espiral.
Un ejemplo que quedará registrado en la historia de la inversión es Francogedden, en enero de 2015. De forma repentina, el banco central suizo revirtió su política de divisas de los tres años anteriores y redujo el límite de divisa del CHF. El franco suizo se disparó un 23% frente al euro y un 21% frente al dólar estadounidense desatando el caos más absoluto en los mercados de forex. Muchos inversores institucionales recibieron un impacto fortísimo y algunas agencias de corretaje cesaron su actividad.
Trading Social y la gestión del riesgo
Una inversión de éxito comienza con una gestión eficaz del riesgo. Este principio se cumple tanto para un gestor de fondos a cargo de millones de dólares como para un principiante que está invirtiendo unos pocos cientos de dólares. La gestión del riesgo es una combinación de prácticas y estrategias que aúnan esfuerzos para minimizar las posibilidades de pérdida y el daño financiero que cualquier pérdida podría provocar.
El Trading Social es un fenómeno de inversión relativamente nuevo, pero que está despegando a lo grande. Algunos comentaristas afirman que podría ser el futuro de la inversión online. El Trading Social anima a los inversores a hablar entre ellos y copiarse las inversiones utilizando un canal de noticias al estilo Facebook. Los inversores pueden echar un vistazo a los portafolios, niveles de riesgo e historiales de inversión de otros, y debatir directamente con ellos acerca del mejor modo de invertir.
Debido a la transparencia de la plataforma de inversión y a la comunicación abierta entre los inversores, existe implícito un nivel de gestión del riesgo en los procesos de Trading Social. Un ejemplo de una web de Trading Social es eToro, la agencia de corretaje que ha logrado atraer a millones de inversores de todo el mundo. Los inversores pueden acceder de forma inmediata a toda la información relevante de los perfiles y canales de noticias de otros inversores (la información personal, como direcciones postales y saldos en cuenta, permanece oculta).
eToro anima a los inversores a copiar a los Popular Investors (que son los inversores con experiencia que ya han atraído a copiadores y ganan una comisión cada vez que alguien les copia) y a crear su propio portafolio de personas. Un portafolio bien diversificado puede proporcionar una gestión del riesgo de gran nivel. Además, usted puede comprobar los niveles de experiencia y las estadísticas de inversión de todas las personas a las que copie, así como preguntarles directamente acerca de sus inversiones y estrategias de inversión.
Es posible copiar a varios inversores de éxito y aumentar la exposición a un amplio abanico de materias primas, acciones, índices, divisas y ETF. Usted también puede mejorar la gestión del riesgo estableciendo la herramienta de copia Stop Loss para cerrar de forma automática cualquier inversión de copia que no cumpla con sus expectativas de desempeño. De esta forma, aunque no esté supervisando su portafolio, estará protegido ante pérdidas inaceptables.
Entre los aspectos de la gestión del riesgo se incluye la mejora del conocimiento financiero y el seguimiento de noticias y acontecimientos financieros. La copia a inversores es una función estupenda para la gestión del riesgo, ya que usted está copiando, en el sentido más estricto de la palabra, a expertos (o eso cabe esperar). Cualquier sitio web de Trading Social le ofrecerá una inmensa variedad de herramientas educativas, gráficos en tiempo real, informes diarios, notificaciones y artículos de blog. Estos recursos suelen ser gratuitos y le enseñarán cómo funcionan realmente los mercados. O, al menos, le ayudarán a evitar los errores más básicos que cometen los inversores noveles.
El Social Trading es una forma de inversión que intenta cumplir con las expectativas de una nueva generación de inversores de todas las edades que espera poder disfrutar de un entorno abierto, transparente y responsable. Si se utiliza de manera adecuada, el Social Trading le ofrecerá un nivel de gestión de riesgo mucho mayor que el de la mayoría de sistemas de inversión.
