Grecia y Siria son los dos acontecimientos internacionales que dominan la atención de la prensa en la actualidad, pero pronto podría ser reemplazado por las tensiones en rápido aumento entre Occidente e Irán. Las sanciones impuestas a este último cada vez estrangula más a Irán, con la mayoría de los principales armadores ya negándose a ir al país. El factor decisivo fue el de la UE, la decisión de los dirigentes de la UE el 23 de enero para realizar un embargo sobre el petróleo iraní, en particular la prohibición del seguro de la nave. Según Bloomberg, el 95% de Europa, esté asegurada en virtud de la legislación europea, y estos buques ya no son capaces de obtener un seguro. Como resultado, el petróleo de Irán está atrapado en sus terminales. Irán representa el 11%de la producción de todo el mundo petróleo.
En respuesta, Irán ha estado amenazando con bloquear los envíos de petróleo a través del Estrecho de Hormuz, a través de los cuales pasa el 20% de todo el mundo. Tanto China como la India en este momento han dicho que no van a reducir las importaciones de petróleo de Irán. El crudo Brent ha subido un 7% sólo este mes, a US $ 118 por barril en la actualidad. El fin de semana, el presidente iraní Ahmadinejad, anunció que estaba listo para anunciar un logro, nuclear, en un claro intento demostración de poder internacional.
Viendo la forma en las que las cosas están tomando forma, esta situación es probable que vaya sólo que peor. Financieramente, una fuerte subida de los precios del petróleo en este momento muy delicado para la economía mundial sería muy problemático.