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Futuro en blanco y negro.

Seguramente la mayoría recordemos las batallitas contadas por nuestros abuelos, incluso las que todavía hoy nos cuentan nuestros padres. En ellas solían haber muchas apreturas, vidas difíciles que forjaron lo que son o fueron nuestros antepasados. Sin embargo, a pesar de todo, la respuesta habitual a la pregunta clave es que aquellos tiempos fueron también muy felices. Una felicidad que se encontraba de multiples maneras pero que se basaba en cosas simples y austeras que, no obstante, deslumbraban sus vidas y aún forman parte de los recuerdos imborrables que nos transmiten.

Algunos de nosotros las escuchábamos atentamente y recordamos esas historias entrañables como la forma de vivir en un mundo antiguo, muy distinto al nuestro. Otros quizá hayan olvidado la mayoría de esas batallitas contadas, o incluso ni siquiera jamás las hayan querido oír con atención, probablemente por puro desinterés en un modo de vida ancestral que difícilmente iba a volver para nadie. El nuestro es un mundo hoy globalizado, moderno, tecnológico, intercomunicado, trepidante, opulento, internacional, excesivo, etc... Podemos calificarlo con infinidad de adjetivos, todos muy distantes al mundo de las batallitas de nuestros antepasados.

Estos calificativos de la actualidad tan excesivos nos han llevado al límite. Al límite del capitalismo en el primer mundo, y sin embargo al ostracismo económico del tercero. No obstante también ha favorecido el despertar de los paises emergentes, que quizá suponga la salvación de occidente en esta Gran Depresión Global en la que nos hemos metido por nuestra mala cabeza. Pero centrándonos en el primer mundo, donde tenemos la suerte de vivir, posiblemente debamos sufrir una cierta regresión que resultaría muy familiar a nuestros abuelos. Podemos volver a ver en el propietario de una vivienda, a una familia pudiente, como en aquellos tiempos en que todos vivían de alquiler, a excepción de los ricos o "de buena familia". Unos tiempos donde la clase media se llamaba trabajadora y era la norma en una sociedad donde todo faltaba y estaba por venir.

Salvando las distancias en el tiempo y en el progreso tecnológico y de todo tipo, lo que está claro es que el consumismo existente en el primer mundo hasta hace bien pocos meses ya se fue. No era sostenible, al menos todavía en este capitalismo conocido. Y no era sostenible para la clase que se ha convertido por primera vez en la historia de occidente en la más numerosa: La clase media. Jamás había visto el primer mundo una clase social mayoritaria, no sólo sin escasez de recursos sino también con tanto poder adquisitivo. Quizás porque la sociedad jamás tuvo tanto poder de endeudamiento y también tal vez porque las economías de los paises desarrollados batieron récords históricos una y otra vez, de forma cíclica, en la segunda mitad del s. XX y hasta el 2006/2007.

Ahora toca purgar les excesos, recalentamientos, burbujas, fraudes, eficiencias, especulaciones, incompetencias, abusos, endeudamientos, dilapidaciones, consumos disparatados, etc, etc, etc... Volveremos, aunque sea parcialmente, al trabajo duro de nuestros abuelos (olvidémonos ya de las 35 y de las 40 horas semanales), a los alquileres masivos, y a ver a los propietarios como las minorias privilegiadas que antaño fueron. A una clase media redimensionada en favor de un aumento de la clase media-baja, o lo que siempre llamaron nuestros antepasados clase obrera o trabajadora. Ya no será habitual que la clase media viaje al caribe de vacaciones gastando el sueldo de un año debido de trabajo, que puede convertirse en un probable subsidio de desempleo; o que cualquier joven mileurista se compre un flamante coche nuevo con muchos caballos y aire acondicionado con el sueldo que ya no ganará en los próximos cuatro años. Pero el problema no está en perder el trabajo y no poder viajar o comprarse un coche (que también). El problema que no hemos sabido identificar en estos años de ceguera expansiva es haber consumido la riqueza producida pasada (ahorros), presente y futura. Nos hemos gastado el futuro, malgastado diría yo. En los próximos años el consumismo nos vendrá moderado a cabezazos contra la pared.

Siendo optimistas podemos pensar que quizás estemos comenzando el proceso de superación de los problemas sistémicos, (esperemos que así sea) pero la sociedad tan sólo empieza a sufrir los efectos correctores de la destrucción de riqueza de toda depresión. Una riqueza virtual que hemos consumido estúpidamente en el último par de décadas en busca de una pseudo-felicidad muy malentendida. Podemos por tanto volver en los próximos años a lo que fueron los Estados del pre-bienestar, el pre-american dream. Y esperemos que esta vez no sea necesario salir de una Guerra Mundial para sentar las sólidas bases de nuevos excesos.

El insensato que reconoce su insensatez es un sabio. Pero un insensato que se cree sabio es, en verdad, un insensato.

Sidhartha Gautama (563 AC-486 AC) Fundador del Budismo.

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  1. #13
    Anonimo
    23/01/09 21:14

    Reflexionaré Dalamar, reflexionaré sobre lo que has dicho porque me has dado que pensar.

    un saludo y gracias

  2. #12
    Dalamar
    23/01/09 07:41

    Javieron, no deberias de perder el sueno por si vas a perder tu trabajo o no, porque probablemente hay poco que puedas hacer tu para no perderlo, como mucho trabajar mas y hacer la pelota para que si tienen que echar a alguien sea al de al lado y no a ti, pero es posible que si todo va mal seais los dos los que vais a la calle, entonces preocuparse por eso no arregla nada! Es mejor perder el sueno pensando y preparando un plan B para que no te pille desprevenido y puedas conseguir dinero o trabajo de otro sitio, a lo mejor pensando, mirando y moviendote descubres algo interesante.

    Muchas veces nos limitamos a lo que tenemos y hemos tenido durante mucho tiempo y no somos capaz de ver las oportunidades, he escuchado muchas veces de gente que ha perdido el trabajo y pensaban que se les terminaba el mundo y resulta que al final han agradecido perder el trabajo porque han encontrado algo mejor que les hace mas felices, asi que no esta de mas buscar ese algo por si acaso, pero no tener que andar con prisas!

    Un saludo,

    Daniel

  3. #11
    Anonimo
    22/01/09 23:36

    No se si se ha publicado mi anterior comentario que no había acabado pero simplemente quería decir que aunque para vosotros perder el empleo no es lo prioritario para mi si que trabajo en una pyme y no soy funcionario con empleo perpetuo, lo demás con todos los respetos es secundario,
    El trabajo es la fuente de dinero y lo aporta casi todo y además os diré que si mantengo el empleo me compraré a final de año un coche de esos que dices de muchos caballos.

    saludos

  4. #10
    Anonimo
    22/01/09 23:26

    Aunque para vosotros el perder el trabajo no es lo mas importante para mí es lo ÚNICO que me quita el sueño pues interpreto el desempleo como el mayor de los males que me puede apear de la calidad que llevo

    Y es que sin dinero, todo se pondrá mas feo y es que uno no es funcionario con el puesto asegurado

    y hasta que eso no ocurra seguiré llevando mi vida sencilla de mileurista

    por

  5. #9
    21/01/09 22:48

    Bull Spread, ya conocía ese video y la reflexión da que pensar. Las civilizaciones siempre fueron cíclicas: Expansión, hegemonía y decadencia. No creo que sea tanto un problema intrínseco del capitalismo (el cominismo tampoco fue sostenible en su época) sino del ser humano en sí.

    Dani, dudé mucho en escribir eso o no, pero me pareció que el artículo necesitaba una nota de optimismo. De todos modos creo que es probable que el sistema no vuelva a tambaleare en los próximos años como lo hizo el pasado octubre. Otra cosa es que se tambaleen y quiebren muchísimas empresas incluídos bancos, eso no nos lo quita nadie.

    Muchas gracias Movendus.

    Lo mismo digo Alejandro, todos deberíamos sentirnos orgullosos de lo que superaron nuestros abuelos.

    Putabolsa, intentamos no estar adulterados, pero reconozco que a veces es complicado colgar 3 artículos por semana que gusten y que estén a la altura. Si quieres "quitarte" puedes intentar pasar el mono leyendo tebeos financieros por la red, que los hay y muy malos. Luego vuelves por aquí y flipas con el artículo más guarrindongo ;) Hablando en serio, el consumismo claro que volverá, sólo tiene que pasar el tiempo suficiente. Y los nietos de los banqueros actuales volveran a inundar de dinero fácil a la clase trabajadora que se creerá media. Los directivos de la banca aumentarán beneficios sin parar y creerán que son cracks, cuando en realidad lo estarán creando.

    Utresivesi, interesante artículo de Sherman.

    Ramón, querría pensar como tú, pero me temo que vamos a ver una depresión distinta pero no mejor.

    El Gallina, plas, plas, plas. Tu párrafo es perfecto, mi enhorabuena. Das en el clavo y lo suscribo totalmente. Sin maquillaje el panorama es de Thriller pero multitudinario. La banca está rota porque se ha roto la sociedad que la mantenía maquillada. Unos dan miedo sin maquillaje y los otros siempre fueron fantasmas pudendos.

    Salud y €.

  6. #8
    El Gallina
    21/01/09 22:13

    Es que nunca fuimos clase media. Los asalariados nunca fuimos clase media, ni lo somos, ni jamás lo seremos, al menos mientras mantengamos esa condición.

    No eramos otra cosa que una banda de pretenciosos a los que nos dieron una hipoteca a 30 años, una colección de prestamos personales y tarjetas de plástico, y nos creimos el cuento porque era muy molón. Nos rodeamos de apariencia cual actor de Hollywood y finalmente nos hemos convertido en calabaza, porque no cabía otra posibilidad.

    Ahora que el maquillaje ha desaparecido, damos miedo.

  7. #7
    Anonimo
    21/01/09 19:03

    Buen post.
    Yo tambien he pensado que la situación actual de hoy se le parece a la del 29 incluso en lo que hemos llamado, "los felices años 20", que aunque no lo eran tanto si lo parcía, y la clase media también parecía abundar, desembocó en el desastre económico y en la psoterior guerra.
    De momento hemos disfrutado de los felices 2000, el aparente cremicimento de la clase media, seguimos con la crisis, posiblemente el crack y esperemos que la correlación se quede ahí!!!
    Un saludo.
    Ramón.

  8. #5
    21/01/09 13:17

    En mi opinión hacia tiempo que no escribías un post de este nivel,quizas porque me "viciaste" a un "cierto nivel" y cuando lo bajaste (por lo menos para mi) lo note enseguida,como cuando un Yonki se ve obligado a cambiar la calidad de lo que se chuta (o simplemente lleva tanto tiempo chutandose con lo mismo que lo que necesita es ya una calidad/pureza mas elevada,jugandose aun mas la vida) y lo nota en que no le produce ese placer y sosiego que le daba antes.

    Dicho esto,estoy casi deacuerdo en todo el post,menos en una cosa:

    El Superconsumismo volverá,no se cuando pero volverá y la gente olvidará sus penurias y los malos tiempos pasados,no se cuando,pero los olvidará,porque la Raza Humana esta condenada a repetir una y mil veces los mismos errores,forma parte de nuestra genética.

  9. #4
    Anonimo
    21/01/09 13:05

    Mi abuelo sería feliz de poder leer este post si él aún viviera.

    Mis felicitaciones uan vez más por vuestro blog.

    Alejandro.

  10. #3
    Anonimo
    21/01/09 09:07

    Precioso artículo. Da gusto leeros

  11. #2
    Dalamar
    21/01/09 06:16

    De verdad crees que los problemas sistemicos ya estan superados? Yo no lo tengo muy claro! Creo que va a hacer falta mucho esfuerzo para que no caiga la mitad de la banca que queda en pie!

    Un saludo,

    Daniel

  12. #1
    Anonimo
    21/01/09 03:57

    Es muy fuerte leer este tipo de post, pero muy necesario para saber lo que podria ocurrir.

    Justamente el ultimo post de mi blog habla del consumo desmedido de los ultimos años y el desgaste del planeta.

    saludos

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