De alsanan.info:
Quizá sea un poco off-topic para los temas que suelo tratar aquí, pero he visto un ejemplo en el libro Ajuste de Cuentas de Vicens Castellano que creo que es lo suficientemente interesante como para recomendar el libro y mostrarlo aquí:
Marta y Nieves son dos hermanas que tomaron caminos distintos desde que eran jóvenes. Marta no quiso estudiar, así que a los 18 años encontró un trabajo y se puso a ganar dinero. No era mucho, pero comparado con las chicas de su edad que seguían estudiando suponía una gran diferencia. Marta se las apañó para dedicar 2.000 euros al año (166€/mes) a un plan de inversión. Después de ocho años había contribuido con 16.000 euros y se cansó de hacer más aportaciones.
Su hermana Nieves, por otro lado, entró en la universidad y estudió ingeniería. A los 26 años, inspirada por su hermana, comenzó a hacer aportaciones anuales de 2.000 euros a un plan de inversión. Y lo siguió haciendo hasta que cumplió los 65 años. Cuarenta años de aportaciones en total, por un valor de 80.000 euros, en el mismo plan de inversión que su hermana, que sólo había hecho aportaciones de 16.000 euros. Cuarenta contra ocho años. ¿Quién tenía más dinero en su cuenta a los 65 años?
Asumiendo que María y Nieves consiguieron un interés del 10 por ciento anual, Nieves acumuló 885.185 euros, pero Marta logró 1.035.160 euros. Es decir, 159.975 euros más que su hermana.
Así que, aunque Marta aportó solamente 16.000 euros, comparados con los 80.000 euros de Nieves, su dinero generó intereses durante ocho años más que su hermana. No fue la cantidad de dinero aportada la que marcó la diferencia, sino el hecho de tener el tiempo a favor. En el tema de las finanzas, responsabilizarse y no dejar la gestión para mañana son aspectos clave.
Marta Nieves Edad de inicio de las aportaciones 18 26 Edad final de las aportaciones 26 65 Años de aportaciones 8 40 Aportaciones anuales 2.000€ 2.000€ Cantidad total aportada 16.000€ 80.000€ Tipo de interés aplicado 10% 10% Total acumulado a los 65 años 1.035.160€ 885.185€
Un diez por ciento anual es una simplificación no demasiado realista, pero creo que el ejemplo deja muy claro de dónde sale el dinero: del tiempo que se le deje “fermentar”.
Si quieres saber más sobre su libro, le hacen una entrevista sobre él aquí.
