“Los clusters son concentraciones geográficas de compañías interconectadas, suministradores especializados, proveedores de servicios, empresas de img-p5sector afines, e instituciones conexas (por ejemplo, universidades, agencias de regulación, o asociaciones del sector), en campos particulares, que compiten pero que también cooperan”Michael E. Porter – Universidad de Harvard - “Ser Competitivo”, 1998
Con esta definición tan elocuente del profesor M.Porter no será dificil asociar la palabra cluster con el mundo de la cerámica en Castellón. Con una concentración superior al 90% del negocio cerámico español en una sóla área tan pequeña como Castellón es fácil adivinar las pros y contras que ello conlleva… cuando la economía va bien, la economía castellonense va mejor, pero cuando entramos en crisis, la provincia de Castellón la sufre con mayor firmeza… No es de extrañar por ello, que en los últimos 12 meses esta provincia haya liderado el crecimiento del paro nacional, un 122% nada más y nada menos… hemos pasado de 21.000 a 47.000 parados… con una tasa de paro del 17,1%, lejos de los envidiables 4,8% de hace unos años…
La situación del sector cerámico es más que preocupante y está llevando a una reestructuración profunda el sector, empresas que cierran, empresas que se fusionan, empresas que reducen personal a ritmo vertiginoso… y encima sin “derecho” a ningún plan especial por parte del Gobierno, pese a ser el producto nº12 en exportaciones españolas… como sí lo tienen el calzado o el textil por ejemplo, con mucha menor cifra de exportaciones…
Cuando acabará esto nadie lo sabe, pero que el sector cerámico y Castellón saldrá antes que el resto de España es bastante probable… Pese a una caída de ventas en el último año del 20%, similar a otros sectores, es relevante que la gran caída ha sido motivada por el mercado nacional (40% de las ventas) debido al desplome de la construcción, pero más relevante es que el mercado exterior, con 2.200 millones de € de ventas en 2.008, sólo sufrió una caída de ventas del 3%, indicador al que nos tenemos que aferrar con fuerza para salir de esta…
Bien haría el sector cerámico con recordar sus actuaciones en anteriores crisis, aunque no fueran tan fuertes como ésta, bien haría en buscar nuevos mercados donde exportar sus productos, bien haría en buscar nuevos usos de sus productos como hizo en su día con las fachadas ventiladas, bien haría en empezar a invertir en tecnología cuando las cosas vengan mejor dadas, bien haría en empezar a “controlar” la distribución de sus productos… donde cada vez más el distribuidor “de toda la vida” emplea al fabricante no sólo como tal, sino también como almacen logístico… bien haría en salir como siempre han salido… pese a que nos ayuden poco, tarde y mal…
