Mira Reyes, frente a tu animadversión hacia mi persona, quiero decirte que no tengo nada contra ti. Estoy convencido de que tu comportamiento viene condicionado por mucho dolor, sensación de impotencia, ansia de justicia que has acabado concretando en un odio extremo hacia todo aquello que pueda oler a Afinsa, ya sea empresa, tranajadores o cualquiera que ose discutir las tesis oficiales que justificaron la intervención/paralización de la empresa y la incautación de nuestro dinero.
Dicho esto y, como quiera que cada cual debe asumir las consecuencias de sus palabras, obras y omisiones, paso a contestarte y a expresarte mis propios planteamientos y conclusiones.
PRIMERO.- Yo no tendría ningún inconveniente en revelar mi identidad, mi profesión, mi trayectoria profesional, siempre y cuando TODOS los que intervienen en el foro hicieran lo propio. Es más, si de mí dependiera, ya nadie podría en un futuro intervenir en el foro sin una plena identificacion, comprobada, comprobable y a disposición de todos. Si esa circunstancia no se da, me vas a tener que permitir que juegue con las mismas reglas que se aplican a todos.
SEGUNDO.- No me voy a molestar en contestar a toda esa retahila de frases y calificativos cariñosos que me dedicas. Es más, atendiendo a tu estado de confusión mental, cegado por el odio, no te lo voy a tener en cuenta.
TERCERO.- ¿Que burda patraña es esa de que con el Convenio, además de no recuperar nada, nos habría tocado poner dinero? Te has tragado y defiendes las tesis oficiales con la fe del converso. Eso es una falsedad de las más dañinas y tú eres uno de los responsables de su propalación. Lo que habríamos recuperado los clientes con un convenio ES EL CONTROL DE LA EMPRESA. Y con el control, la capacidad de decidir lo que consideráramos mejor para nuestros intereses, en función del desarrollo de los acontecimientos, la situación de la economía, etc. etc. Ahora, gracias a tu inestimable colaboración (y la de otros, claro) hemos perdido cualquier posibilidad o capacidad de influir en nada. Nos habéis puesto a todos los afectados a los pies de los caballos ... y encima estáis contentos y ufanos por ello.
CUARTO.- No es ni ha sido nunca mi interés defender a la empresa. Yo no soy nadie para explicar el negocio de Afinsa (ni posiblemente tú tampoco fueras capaz de entenderlo) ni es a mí a quien tienes que pedir explicaciones o justificaciones. Nosotros los afectados no podemos hacer nada para cambiar la realidad de lo que era Afinsa (realidad que no todo el mundo ve igual), pero podemos (mejor dicho, podíamos) decidir cómo actuar. Yo estoy en este lío como un afectado más, luchando por recuperar mi dinero frente a una maquinaria político-jurídico-económica con un poder inmenso que viene actuando como una apisonadora, pisoteando mis derechos y saqueando mis bienes.
En resumen, y refiriéndome a tu frase final, andas empecinado en conocer "mis argumentos" cuando lo que buscas es encontrar algo con lo que unir, ensamblar ese barullo tan grande que inunda tu atormentada mente. Una mente incapaz de concebir que alguien esté en las antípodas de tus planteamientos y opiniones sin ser una reencarnación de Satán. Sigues perdiendo el tiempo tratando de discernir si son galgos o si son podencos. Y, como en la fábula, la jauría te va a pillar. Allá tú.