Para este jueves tenemos de dato del índice de precios al consumidor de Estados Unidos, el cual es uno de los indicadores más seguido por los inversores y analistas. Se espera que el IPC haya subido un 0,4% durante el mes pasado, pero cualquier lectura muy por encima o por debajo de lo esperado podría ocasionar alta volatilidad en los mercados financieros.
El IPC base, el cual excluye lo que son alimentos y energía pudo haber subido un 0,5%. De llegar a salir por encima de lo esperado, la tasa de rendimiento de los bonos soberanos estadounidenses se podría disparar de nuevo, apoyando al dólar y presionando a las acciones a la baja. El sector de tecnología probablemente sea el mayor damnificado si el IPC llega a salir por encima de lo esperado.
El dólar sería apoyado por una lectura del IPC por encima de lo esperado, debido a que eso presionaría a la Reserva Federal de Estados Unidos para que suba los tipos de interés a un ritmo más acelerado de lo previsto. El dólar ha frenado su caída recientemente frente a sus principales contrapartes, precisamente porque no se sabe cómo vaya a salir el dato de inflación.
Con el sector laboral fuerte y los salarios aumentando más de lo esperado, es posible que la inflación se mantenga al alza en Estados Unidos. De hecho, el dato de empleo estadounidense del viernes pasado aumentó los riesgos de que se genere una inflación de salarios. La inflación de salarios se da cuando las empresas tienen que pagarles más a sus trabajadores para poder retenerlos o atraer a nuevos trabajadores.
Al tener los trabajadores más dinero en sus bolsillos, eso aumenta la demanda por productos y servicios en la economía y los precios empiezan a subir. Sin embargo, los efectos son los deseados en una economía que está en expansión. La clave está en no dejar que la inflación se salga de control o dejarla que baje por sí sola, como sigue pensando el Banco Central Europeo que sucederá.
Por otro lado, existe la posibilidad de que el IPC de Estados Unidos salga por debajo de lo esperado. Recientemente se ha empezado a ver una mejora en las cadenas de suministro y distribución, lo cual contribuye al flujo libre de mercancías y a que bajen los costes de producción. Por lo tanto, si el IPC llega a salir por debajo de lo esperado, las acciones podrían aumentar aún más su impulso alcista.
Buena temporada de resultados empresariales
Otro factor que ha estado apoyando a las acciones estadounidenses y a las acciones globales en general son los buenos resultados empresariales, los cuales justifican la reciente subida que han tenido los índices de bolsa. Los inversores dejan a un lado los temores por una posible subida de tipos de interés y se enfocan en los reportes de resultados empresariales, los cuales han estado saliendo por encima de lo esperado.
En Europa, las ganancias empresariales también han sido alentadoras y el sector automotriz europeo es uno de los que más ha subido recientemente. Con la posibilidad de que los tipos de interés suban en Estados Unidos, el sector bancario también ha sido apoyado al alza, incluso en Europa debido a que muchos de los bancos europeos tienen operaciones en Estados Unidos.
Se recupera el sector tecnológico
Desde inicios de este año, el Nasdaq empezó a caer desde la zona de los 16.500 puntos hasta los 14.000 puntos como lo podemos observar sobre el gráfico diario, cortesía del broker de Forex y CFDs, ActivTrades. Al llegar a los 14.000 puntos, el Nasdaq empieza a recuperarse, debido a que el sector tecnológico regresa al alza. El Nasdaq deja inicialmente una falsa ruptura por encima del EMA de 200 días, pero ahora regresa e intenta superar esa zona de los 15.000 puntos. De continuar subiendo, el EMA de 55 días que se encuentra por debajo de los 15.500 puntos podría actuar como resistencia.
Alexander Londoño - Analista de Mercados, ActivTrades
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