El gestor Alberto Espelosín nos trae la carta mensual del mes de abril de 2018 del fondo Abante Pangea, donde destaca los buenos resultados que ha obtenido su fondo durante este pasado mes y los principales movimientos de las empresas en cartera, que están pasando por cambios corporativos y también nos da su visión macroeconómica sobre los mercados.
Abril ha sido un mes positivo para Abante Pangea: se ha generado alfa en la cartera de acciones, que ha estado invertida al 67% de media y, con ese porcentaje, se ha obtenido una rentabilidad del 4,58%, mientras que el Euro Stoxx 50 ha registrado una subida del 5,2% y el Stoxx 600 se ha revalorizado un 3,9%. La cobertura ha dado un resultado plano y la exposición neta del fondo ha sido del 17,8%, con beta positiva. Las ideas de la cartera de acciones están funcionando bien.
En este sentido, hay que destacar la presentación formal de la OPA sobre Shire -que es la principal posición del fondo-, por parte de Takeda, aunque, en mi opinión, creo que en breve aparecerán nuevos actores. Por otro lado, hay que hablar de Telecom Italia, que, tras la reciente entrada de Elliott, ha sido otro de los valores que ha contribuido de forma muy positiva al comportamiento del fondo. Y aquí también conviene destacar el buen hacer de otras posiciones como Pharol, donde un fondo acaba de tomar un 10%, y de Ericsson. Es decir, lo que está sucediendo es que en todas las principales ideas del fondo hay mucho movimiento corporativo, lo que demuestra que los precios a los que compramos estas posiciones eran muy atractivos.
El peso de la cartera sigue concentrado en ‘farmas’, ‘telecos’ y consumo estable. Además, sigo en el proceso de transición de eliminar el riesgo de mercado, esperando una caída del Nasdaq 100 a la zona de los 6.000 puntos. Mi visión global del actual escenario no ha cambiado nada, y continúo creyendo que todavía queda una parte final de caída en los mercados, que puede dar una buena oportunidad en algún momento del año para tomar algo mas de riesgo y, mientras, tanto la precaución debería ser máxima. Aunque en la carta de principios de año manifesté que este 2018 no iba a hacer el manuscrito de la hoja de ruta que llevo poniendo en práctica muchos años, he recibido bastantes peticiones de los clientes para que la haga.
Y, creo que antes que mis preferencias o deseos de hacerla o no, están sus demandas y, por ello, ante la insistencia de muchos inversores, y por respeto a ustedes, que son los partícipes del fondo, lo voy a hacer. Repito, como todos los años, que este ejercicio no conlleva ninguna soberbia de intentar adivinar lo que va a hacer el mercado, sino, simplemente, compartir con ustedes los niveles en los que me fijo en los distintos activos para tomar decisiones de inversión y gestionar así la flexibilidad que tiene el fondo.
La generación de valor en la selección de valores es importante y, por primera vez en muchos meses, Europa empieza a hacerlo mejor que Estados Unidos. Es decir, volvemos a la normalidad que llevábamos tiempo esperando y eso se está notando en los resultados. La caída del Nasdaq que preveo será el punto para cambiar la cobertura hacia Europa y posteriormente ir eliminando el riesgo de mercado, dentro de los tiempos que el mercado está marcando.
Lo más importante del año es que el objetivo de beta positiva está ya implementado con exposiciones netas, al menos superiores al 10%, y con una cartera que presenta un valor relevante por su alta rentabilidad por dividendo y generación de free cash-flow.
Con todo, no puedo dejar de obviar los riesgos importantes que, como analista macro, veo en el mercado y, por eso, continúo siendo extremadamente prudente y sigo viendo que esto es solo un rebote, para luego volver a testear los mínimos de febrero. Espero que los rangos que les voy a marcar les sirvan de ayuda para tomar decisiones y, a pesar de que había decidido jubilarme de esta tarea, también considero que debo hacer lo que ustedes me demandan y creo que ha habido interés suficiente para presentarles mi hoja de ruta para lo que queda de 2018.
Un saludo,
Alberto Espelosín