Son muchas las posibilidades a la hora de elegir un fondo de inversión y debemos tener claro varias cosas antes de empezar a buscar. Lo primero, saber que perfil de riesgo somos, teniendo en cuenta qué buscamos. Una vez tenemos nuestros objetivos, debemos saber qué ratios son los más adecuados para nuestras necesidades, para así encontrar a los mejores fondos de inversión en base a nuestras necesidades.
Perfil de riesgo y ratios de interés
Perfil de riesgo
El perfil de riesgo es la base de la toma de decisiones en inversión, siendo la primera pregunta que debe responder cualquier inversor. Además, es fundamental conocer los diferentes riesgos que existen a la hora de invertir. Se suelen usar 3 o 5 perfiles diferentes de riesgo, de más defensio a más agresivo, siendo los habituales:
- Defensivo
- Moderado
- Agresivo
Fondutest >>> Con esta herramienta podrás conocer cuál es tu perfil de riesgo y los productos que mejor se adaptan a tus necesidades.
Defensivo
Se caracteriza por una gran aversión al riesgo, siendo una prioridad para este inversor que su patrimonio no pierda sufra minusvalías a causa de una inversión. Para ellos, la estabilidad de los rendimientos son la prioridad, junto con productos que rara vez presenten rendimientos negativos. La rentabilidad suele ser secundaría, tratando de obtener un rendimiento, como mínimo igual a la inflación. El abanico de posibilidades de inversión es reducido, siendo los productos típicos la renta fija, o productos mixtos defensivos, así como los fondos de inversión de retorno absoluto o multiestrategia con una visión a preservar el capital a largo plazo en cualquier entorno de mercado.
Para este perfil, es importante la protección del capital así como la estabilidad de los rendimientos. Debemos verificar la cantidad de años en negativo que presenta, así como la máxima caida experimentada por el fondo, mediante el Drawdown. Además, es interesante tratar de reducir todo lo posible la volatilidad de sus rendimientos. Hay que buscar fondos con una clara vocación a preservar el capital, pudiendo sacrificar rentabilidad a largo plazo para así cumplir este objetivo.
Moderado
El perfil moderado se considera un perfil intermedio entre defensivos y agresivos. No quiere asumir los grandes descensos que puede tener la renta variable, pero sí está dispuesto a asumir riesgo para conseguir rentabilidades superiores a la inflación. Estos inversores tiene un plazo temporal más largo que los consevadores. Para ellos, lo ideal es componer carteras mixtas, con carga de renta fija y renta variable, en función de hacia donde se perfilen más. Todos los productos encajan en este perfil, siendo el punto clave el peso que les asignamos.
Para el perfil moderado, se buscan fondos con una buena relación entre el rendimiento aportado y el riesgo soportado, por lo que hay que maximizar el ratio de Sharpe, ya que pone en valor la relación entre ellos. Al tener cierta aversión al riesgo, es importante que el fondo no tenga un drawdown excesivo, acorde con su tolerancia al riesgo. Puede ser intenresante ver en las fichas de los fondos la cantidad de patrimonio en acciones, bonos o efectivo, para así valorar la exposición del fondo y seleccionar el que más se ajuste a nosotros.
Agresivo
Son inversores que tienen poca aversión al riesgo, ya que su objetivo final es obtener la máxima rentabilidad posible a largo plazo. Están dispuestos a asumir pérdidas a corto y medio plazo, para así obtener rendimientos elevados a largo plazo. Sus carteras están compuestas principalmente por renta variable, pero también pueden incorporar renta fija High Yield, así como fondos de gestión alternativa agresivos y renta variable de mercados emergentes. Se caracterizan por tener un plazo temporal más elevado.
Para el perfil agresivo el riesgo se sitúa en un plano secundario, siendo lo más importante construir carteras con el máximo rendimiento posible a largo plazo. Es importante tener fondos con alto Tracking Error, para que tengan capacidad de salirse de su índice de referencia, y así ganar más que su mercado. Además estos fondos deben de batir tanto a sus índices como a sus categorías, situándose en el percentil más alto de su categoría.
Conclusiones
No existe el santo grial. No hay un indicador para cada estilo de gestión o perfil de riesgo. Debemos tener una visión global y analizar las relaciones entre unos ratios y otros, para así determinar qué fondos se ajustan mejor a nuestras características, para posteriormente encontrar al mejor de ellos. Para ello, tenemos que conocer bien las diferencias entre los perfiles de riesgo y para qué sirve cada ratio de valoración.