En julio de 2014 la Unión europea adoptó la Directiva 2014/92/UE sobre la comparabilidad de las comisiones conexas a las cuentas de pago, el acceso a cuentas de pago básicas y el traslado de cuentas de pago. Este último objetivo pretende promover que el cambio de banco sea un trámite libre de trabas y que no requiera una intervención engorrosa por parte del cliente. En otros términos, que tanto el banco antiguo como el nuevo y los emisores de cobros e ingresos están obligados a facilitar el cierre de una cuenta y el traslado de las domiciliaciones a otra, cuando así lo desea el cliente.
La transposición de esta directiva en los países europeos ha dado lugar al florecimiento de las llamadas “plataformas de movilidad”, que permiten tratar de forma totalmente digital y asistida el cambio de las domiciliaciones de una cuenta a otra.
En España, la transposición de esta directiva se hizo finalmente el pasado 24 de noviembre de 2017, con la aprobación a toda prisa del Real Decreto-ley 19/2017, después de varios avisos de incumplimiento de plazo por parte de la Unión europea y justo antes de que los comisarios europeos formalizaran finalmente una demanda ante el Tribunal de Justicia de la Unión europea. La situación de gobierno en funciones que vivió España durante más de 300 días hizo que 2016 fuese un año en el que no se reguló apenas nada. El Real Decreto-ley 19/2017 todavía no define cuáles van a ser los procedimientos para su aplicación, pero está previsto que se expliciten en los próximos meses.
También en noviembre del año pasado, el banco Self Bank se adelantaba a la transposición de la directiva, al unirse con la plataforma alemana FinReach y ser pionero en la eliminación de barreras a la movilidad bancaria, con el lanzamiento de su nuevo servicio Portabilidad Self.
¿Cómo funciona el servicio de portabilidad de Self Bank?
El servicio permite que los trámites para cambiar de banco se puedan hacer ahora de forma totalmente digital, automática y gratuita. Ofrece al cliente la posibilidad de migrar a su cuenta de Self Bank los recibos e ingresos que tenga domiciliados en otra entidad en una operación que le tomará solo unos minutos. Basta con que se introduzcan los datos de acceso de banca electrónica de la entidad de la que desea migrar los cargos e ingresos y el servicio se encarga de analizar en tiempo real todas las operaciones de cobros y pagos; de esta forma, identifica los diferentes proveedores de servicio que están domiciliados y una vez que el cliente haya seleccionado los que desea traspasar, el servicio gestiona de forma digital la tramitación de las notificaciones de cambio de datos bancarios con ellos.
Portabilidad Self también identifica las transferencias periódicas para que el cliente pueda volver a configurarlas en su cuenta en Self Bank. Además, si el cliente decide cerrar su antigua cuenta, el servicio se encarga de la gestión con la entidad de salida.
Durante los 90 días seguidos a contar desde su alta en el servicio, el cliente puede acceder en todo momento a su solicitud de cambio de cuenta, para revisar sus datos o trasladar domiciliaciones adicionales a su cuenta en Self Bank. De esta forma, el cliente es libre de elegir migrar sus recibos, ingresos y transferencias de un golpe o de forma paulatina, lo que cobra sentido para aquel que es nuevo cliente y que está todavía en fase de “testar” a su nueva entidad bancaria.
Es más que probable que Portabilidad Self y los servicios similares que acaben llegando detrás de él de la mano de las demás entidades bancarias españolas contribuyan a acelerar el fenómeno de transformación de las cuentas secundarias – sobre todo, de entidades digitales y usadas hasta ahora como complemento - en cuentas principales, donde se domicilian los ingresos.
Porque ya a partir de ahora cambiar de banco va a ser tan rápido y sencillo como cambiar de compañía de móvil. Si quieres probar este servicio gratuito, tan solo tienes que abrir una Cuenta Self: es la cuenta corriente sin comisiones y con tarjetas gratis de Self Bank.
