Hoy quería compartir con vosotros una reflexión relacionada con los precios y las ideas porque un tema que me fascina es la volatilidad y las señales de precios como mecanismo de coordinación.
Los precios están dándonos información constantemente que nos permite tomar decisiones económicas.
Las bolsas y mercados financieros son atractivos por este motivo pues nos obligan a procesar datos y más datos sin parar, analizando todo tipo de métricas, estadísticas, informes. Son los lugares donde las divergencias entre oferta y demanda se aplanan gracias a este descomunal procesamiento y el incentivo para seguir haciéndolo es el beneficio económico.
Cada vez que alguien dice aquello de "los especuladores" realmente no tiene ni idea de lo que está diciendo.
Es seguramente uno de los procesos peor entendidos.
Twitter es lo mismo
Llevo un tiempo ya viendo a twitter como algo similar. Si bien es cierto que existe una descomunal cantidad de gente que te intenta hacer perder el tiempo, esta se puede gestionar a base de utilizar el botón de bloqueo sin piedad.
El que no usa el botón de bloquear sin piedad todavía no ha entendido que hemos cambiado por completo de paradigma y en este nuevo estamos sometidos a cantidades de información para las que no hemos sido diseñados por la evolución.
Mientras que nuestro "diseño" nos obliga a tratar de no perdernos nada y a leer todo lo que cae en nuestras manos para procesar información en busca de ese nuevo "pico de dopamina", en el mundo actual el botón de bloquear es la mejor manera de eliminar el ruido y quedarnos con la señal. La capacidad de "decir no" a información no deseada será lo que te diferenciará mientras que antes de internet lo era tu capacidad para procesar cuanto más mejor.
Twitter para mí se está convirtiendo en un lugar similar a las bolsas y mercados financieros en el sentido de que es el lugar donde se están procesando las divergencias entre ideas y opiniones a nivel mundial.
Cuando usamos twitter correctamente, cada vez que publicamos un tweet lo que estamos haciendo es validar su "market fit" en "el mercado de ideas". Nuestras ideas son validadas y reajustadas poco a poco en una especie de mecanismo neuronal global que está permitiendo a nuestros cerebros conectar y sincronizarse con todo tipo de cerebros en diferentes latitudes (de ahí que me guste escribir en inglés en twitter, me cuesta mucho menos encontrar "market fit" a mis ideas).
Estamos con ello construyendo una serie de "aldeas virtuales" o "ciberjurisdicciones" de gente conectada entre sí que comparte formas de pensar y que gracias a Bitcoin va a ser capaz de cooperar cada vez más sin barreras independientemente de su ubicación geográfica.
Cada vez conectaremos más con gente al otro lado del globo que con gente próxima a tí y en todos los casos ocurrirá que cada vez estaremos menos a gusto con las jurisdicciones reales en las que vivimos. Buscaremos jurisdicciones reales que se parezcan más y más a las ciberjurisdicciones en las que empezamos a vivir y esto hila por completo con la visión de ciudades Estado que ya he compartido con vosotros en algunos de mis posts aquí y aquí.
Por cierto que gracias a los emails que recibo de muchos de vosotros me doy cuenta de que mi blog de Rankia me permite también conectar con gente afín y os lo agradezco mucho.
Dime lo que opinas abajo y gracias por estar ahí :)